VII. JUVENTUD. GAZTAROA
Desde mediados de siglo se ha prolongado de manera significativa el periodo de la vida dedicado a la instrucción por lo que los años que componen la edad juvenil vienen a coincidir, en la mayoría de los casos, con los dedicados al estudio de carreras y profesiones.
Por otra parte, si la sociedad infantil se caracteriza por la actividad lúdica, la sociedad juvenil va a estar marcada por la relación amorosa. Las rondas, las fiestas y el baile en sus múltiples modalidades serán lugares de encuentro entre los jóvenes de ambos sexos.
En la zona mediterránea de la Vasconia peninsular los jóvenes se han asociado tradicionalmente en mocerías locales que en cierta medida pautaban las actividades propias de esta edad. Este asociacionismo juvenil se manifiesta más claramente en el ámbito religioso; durante la primera mitad del siglo en las parroquias de Vasconia, tanto peninsular como continental, proliferaron congregaciones piadosas destinadas exclusivamente a jóvenes, tanto chicas como chicos.
En lo que atañe a los jóvenes varones, mediada la edad juvenil, se veían obligados comúnmente a cumplir el servicio militar ausentándose de un entorno natural durante un período largo de tiempo, lo que marcaba una etapa de su vida.