Milano, milano
En Bernedo (A) se describe así este juego: El niño que hace de milano se sienta en el centro del corro con los ojos tapados y dos palos en la mano. Los demás giran en corro mientras cantan.
- Milano, milano,
- los ojos tienes canos
- quién te los canó
- el currucucú.
- Daremos una vuelta
- por el perejil
- a ver si milano
- quiere revivir.
Después todos le preguntan: «¿Qué haces milano?», y éste frotando los palos, responde: «Afilar los cuchillos para mataros».
A continuación uno del corro le toca y el milano tiene que adivinar quién ha sido. Si acierta se intercambian los papeles.