Diferencia entre revisiones de «Chocar las manos bostekoa eman»

De Atlas Etnográfico de Vasconia
Saltar a: navegación, buscar
 
(No se muestra una edición intermedia del mismo usuario)
Línea 1: Línea 1:
 
Ha sido común cerrar el trato dándose ambas partes, comprador y vendedor, un apretón de manos, ''alkarreri bostekoa emonda''. Así se ha constatado en Apodaca, Bernedo, Moreda, Treviño, Urkabustaiz, Valdegovía (A); Anboto-Olaeta, Belatxikieta, Valle de Carranza, Enc ar taciones, Urduliz, Zeanuri (B); Elgoibar (G); Allo, Eugi, Lezaun, Sangüesa y Ultzama (N). En Larraun (N) todavía hoy se practica el gesto de darse la mano el comprador y el vendedor como signo de cerrar el trato, ''tratoa itxi''.
 
Ha sido común cerrar el trato dándose ambas partes, comprador y vendedor, un apretón de manos, ''alkarreri bostekoa emonda''. Así se ha constatado en Apodaca, Bernedo, Moreda, Treviño, Urkabustaiz, Valdegovía (A); Anboto-Olaeta, Belatxikieta, Valle de Carranza, Enc ar taciones, Urduliz, Zeanuri (B); Elgoibar (G); Allo, Eugi, Lezaun, Sangüesa y Ultzama (N). En Larraun (N) todavía hoy se practica el gesto de darse la mano el comprador y el vendedor como signo de cerrar el trato, ''tratoa itxi''.
  
Se han conocido también fórmulas acuñadas como «trato hecho» que se pronunciaban a la vez de darse el apretón de manos y que simbolizaban la asunción del compromiso por ambas partes (Moreda). En algunos lugares de las En- cartaciones se ha constatado el dato de que se daban la mano mientras se estaba negociando y las soltaban en caso de que no hubiera trato.
+
Se han conocido también fórmulas acuñadas como «trato hecho» que se pronunciaban a la vez de darse el apretón de manos y que simbolizaban la asunción del compromiso por ambas partes (Moreda). En algunos lugares de las Encartaciones se ha constatado el dato de que se daban la mano mientras se estaba negociando y las soltaban en caso de que no hubiera trato.
  
 
En Apodaca a la hora de cerrarlo, si comprador y vendedor se ponían de acuerdo en partir el precio, sellaban el pacto con un apretón de manos a la vez que dos amigos o conocidos suyos las ponían también sobre las de ellos. En Belatxikieta (Amorebieta) cuando finalizaba el regateo entre el comprador y el vendedor, se llamaba como testigos del acuerdo a que hubieran llegado a una o dos personas que gozaran de la confianza de ambos.
 
En Apodaca a la hora de cerrarlo, si comprador y vendedor se ponían de acuerdo en partir el precio, sellaban el pacto con un apretón de manos a la vez que dos amigos o conocidos suyos las ponían también sobre las de ellos. En Belatxikieta (Amorebieta) cuando finalizaba el regateo entre el comprador y el vendedor, se llamaba como testigos del acuerdo a que hubieran llegado a una o dos personas que gozaran de la confianza de ambos.
Línea 9: Línea 9:
  
 
<div align="right">[[El_acuerdo_de_compra|'''↵''' Volver al apartado principal]]</div>
 
<div align="right">[[El_acuerdo_de_compra|'''↵''' Volver al apartado principal]]</div>
{{DISPLAYTITLE: Chocar las manos, bostekoa eman}} {{#bookTitle:Ganadería y pastoreo en Vasconia|Ganaderia_y_pastoreo_en_vasconia}}
+
{{DISPLAYTITLE: Chocar las manos, bostekoa eman}} {{#bookTitle:Ganadería y Pastoreo en Vasconia|Ganaderia_y_pastoreo_en_vasconia}}
 
&nbsp;
 
&nbsp;

Revisión actual del 13:41 4 jul 2019

Ha sido común cerrar el trato dándose ambas partes, comprador y vendedor, un apretón de manos, alkarreri bostekoa emonda. Así se ha constatado en Apodaca, Bernedo, Moreda, Treviño, Urkabustaiz, Valdegovía (A); Anboto-Olaeta, Belatxikieta, Valle de Carranza, Enc ar taciones, Urduliz, Zeanuri (B); Elgoibar (G); Allo, Eugi, Lezaun, Sangüesa y Ultzama (N). En Larraun (N) todavía hoy se practica el gesto de darse la mano el comprador y el vendedor como signo de cerrar el trato, tratoa itxi.

Se han conocido también fórmulas acuñadas como «trato hecho» que se pronunciaban a la vez de darse el apretón de manos y que simbolizaban la asunción del compromiso por ambas partes (Moreda). En algunos lugares de las Encartaciones se ha constatado el dato de que se daban la mano mientras se estaba negociando y las soltaban en caso de que no hubiera trato.

En Apodaca a la hora de cerrarlo, si comprador y vendedor se ponían de acuerdo en partir el precio, sellaban el pacto con un apretón de manos a la vez que dos amigos o conocidos suyos las ponían también sobre las de ellos. En Belatxikieta (Amorebieta) cuando finalizaba el regateo entre el comprador y el vendedor, se llamaba como testigos del acuerdo a que hubieran llegado a una o dos personas que gozaran de la confianza de ambos.

En Liginaga (Z), según recogió Barandiaran en los años treinta, cuando dos individuos hacían un contrato de compraventa, ambos se dab an la mano, y un tercero las golpeaba mientras permanecían unidas, y las separaba, momento en el que se consideraba cerrado el mismo[1].


 
  1. José Miguel de BARANDIARAN. «Materiales para un estudio del pueblo vasco: En Liginaga (Laguinge)» in Ikuska. Nº 8-9 (1948) p. 13.