Diferencia entre revisiones de «Cultivo de arboles frutales»
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El cultivo de árboles frutales ha sufrido notables oscilaciones con el trascurso de las décadas y al mismo se han incorporado no solo nuevas especies antes desconocidas sino también variedades comerciales en un proceso equivalente al que han experimentado el resto de cultivos. Se trata de variedades que buscan incrementar la producción y que requieren técnicas de cuidado muy diferentes a las que se llevaban a cabo en tiempos pasados. | El cultivo de árboles frutales ha sufrido notables oscilaciones con el trascurso de las décadas y al mismo se han incorporado no solo nuevas especies antes desconocidas sino también variedades comerciales en un proceso equivalente al que han experimentado el resto de cultivos. Se trata de variedades que buscan incrementar la producción y que requieren técnicas de cuidado muy diferentes a las que se llevaban a cabo en tiempos pasados. | ||
Revisión del 07:06 15 jun 2018
El cultivo de árboles frutales ha sufrido notables oscilaciones con el trascurso de las décadas y al mismo se han incorporado no solo nuevas especies antes desconocidas sino también variedades comerciales en un proceso equivalente al que han experimentado el resto de cultivos. Se trata de variedades que buscan incrementar la producción y que requieren técnicas de cuidado muy diferentes a las que se llevaban a cabo en tiempos pasados.
A pesar de su abandono actual, recogemos también alguna información sobre el castaño. El fruto del castaño fue uno de los alimentos de mayor importancia no solo para los animales (los cerdos echados al monte) sino también para las familias sobre todo cuando flojeaban las cosechas de trigo. Fue árbol muy abundante hasta principios del siglo XX, pero la tendencia a roturar terrenos y una enfermedad que padeció tras la Gran Guerra del 1914-1918, contribuyeron a su remisión.
La castaña constituyó en este sentido un gran socorro para la gente pobre, que se mantenía de ellas en gran parte, bien cocidas o asadas al tamboril, previa eliminación de un trocito para evitar que estallasen. En la década de 1960 ya no se consumían tanto, a excepción de las personas necesitadas.
