Denominaciones

Se han recogido algunas denominaciones específicas para designar al entierro de niño. En Murchante (N) se le llamaba «entierrillo»; en Gamboa y San Román de San Millán (A) «mortachuelo» y en Moreda (A), Viana y Sangüesa (N) «mortichuelo». Al niño difunto ha sido común llamarle en castellano «ángel» y en euskera aingerua.