Diferencia entre revisiones de «El paseo del niño en la actualidad»

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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Actualmente la mujer dedica mayor número de horas al paseo de sus hijos ya que dispone a su vez de más tiempo libre y mayores facilidades. La incorporación de los coches y de las sillas facilita en gran medida la tarea de sacar a los niños de casa con lo que los paseos se hacen con más frecuencia y no resultan tan pesados para la madre. En el caso de que ambos progenitores trabajen también lo cuidan los abuelos y chicas contratadas para este fin.
 
Actualmente la mujer dedica mayor número de horas al paseo de sus hijos ya que dispone a su vez de más tiempo libre y mayores facilidades. La incorporación de los coches y de las sillas facilita en gran medida la tarea de sacar a los niños de casa con lo que los paseos se hacen con más frecuencia y no resultan tan pesados para la madre. En el caso de que ambos progenitores trabajen también lo cuidan los abuelos y chicas contratadas para este fin.
  
[[File:6.76 Bermeo (B) 1991.jpg|center|600px|Bermeo (B), 1991. Fuente: Segundo Oar-Arteta, Grupos Etniker Euskalerria.]]
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En Lezama (B) reconocen que hoy en día las madres se esmeran al preparar los cochecitos poniendo sábanas, fundas de almohada y cubrecoches a menudo bordados, con puntillas y entredoses, además de limpias y bien planchadas. También prestan la misma preocupación y cuidado por las ropitas del niño.
 
En Lezama (B) reconocen que hoy en día las madres se esmeran al preparar los cochecitos poniendo sábanas, fundas de almohada y cubrecoches a menudo bordados, con puntillas y entredoses, además de limpias y bien planchadas. También prestan la misma preocupación y cuidado por las ropitas del niño.

Revisión actual del 09:40 11 jun 2019

Como ya se ha indicado con anterioridad la introducción de los cochecitos para pasear a los niños se inició, como con otras muchas innovaciones, entre las familias adineradas y en las zonas urbanas. La mejora de los caminos en las zonas rurales favoreció su difusión.

A modo de ejemplo incluimos los datos constatados en varias de las localidades encuestadas a través de las cuales se aprecia esta evolución.

En Salvatierra (A) en el primer tercio de siglo se comenzó a sacar a los niños a la calle acomodados en coches especiales, primeramente las familias mejor situadas y poco a poco las restantes.

En Bermeo (B) los cochecitos, kotxie, umien kotxie, empezaron a generalizarse en la década de los cincuenta. Desde entonces el lugar preferido para el paseo de los niños pequeños ha sido el parque. Las mujeres se reúnen por grupos durante las horas de sol teniendo junto a sí a los críos pequeños. Con el fin de lucir a sus hijos los sacan con sus mejores vestidos y adornos.

En Durango (B) paseaban al niño en brazos en la zona rural; por el contrario en muchas casas de la zona urbana disponían de cochecitos más o menos lujosos. Los mejores eran los ingleses, todos ellos vestidos con sábanas y almohadas bordadas con puntillas encañonadas.

En Zeanuri (B) se introdujo el coche en los años setenta, anteriormente sólo algunas familias de la plaza lo utilizaban.

En Apodaca (A) no se recurrió al cochecito hasta después de los años sesenta ya que debido al mal estado de los caminos del pueblo era imposible su utilización. Tras el asfaltado de las carreteras su uso se incrementó hasta generalizarse.

La generalización de su uso es relativamente tardía, a partir de los años sesenta. Hoy en día son comunes y se emplean hasta que el niño tiene aproximadamente diez o doce meses, a partir de esta edad se sustituyen por las sillas.

Actualmente la mujer dedica mayor número de horas al paseo de sus hijos ya que dispone a su vez de más tiempo libre y mayores facilidades. La incorporación de los coches y de las sillas facilita en gran medida la tarea de sacar a los niños de casa con lo que los paseos se hacen con más frecuencia y no resultan tan pesados para la madre. En el caso de que ambos progenitores trabajen también lo cuidan los abuelos y chicas contratadas para este fin.

Bermeo (B), 1991. Fuente: Segundo Oar-Arteta, Grupos Etniker Euskalerria.

En Lezama (B) reconocen que hoy en día las madres se esmeran al preparar los cochecitos poniendo sábanas, fundas de almohada y cubrecoches a menudo bordados, con puntillas y entredoses, además de limpias y bien planchadas. También prestan la misma preocupación y cuidado por las ropitas del niño.

En Gorozika (B) hoy en día pasean a los niños en los cochecitos que se compran en el mercado. Estos dan la posibilidad de llevar al niño tanto tumbado como sentado. Ya no se carga con ellos en brazos.

Como ya se ha comentado anteriormente en la actualidad también es la madre quien se ocupa preferentemente de pasear al niño, pero se ha producido un gran cambio en lo que respecta al padre. Antiguamente éste nunca llevaba de paseo a los niños, bien por vergüenza o por falta de tiempo. En cambio hoy en día es muy habitual ver a los hombres con los cochecitos paseando a sus hijos, especialmente los fines de semana o las tardes de los días laborables. De todas formas en algunas localidades aún no es muy común y los maridos que pasean al niño en compañía de su mujer son calificados de modernos y en muchas ocasiones se interpreta su compañía como una imposición de la mujer (Artajona-N).

En Moreda (A) prácticamente no se pasea a los niños "a aupas", lo más normal es que se haga en coches. La labor de sacarlos de casa siempre ha sido realizada por las madres, nunca por los padres; sin embargo en la actualidad se observa que además de pasearlos las madres los días laborales, los domingos y festivos también se ocupan de ello los padres, aunque acompañados de sus esposas.

Incluso en las zonas rurales hoy en día las mujeres van menos al campo por lo que pueden pasear a los niños con frecuencia los días laborables por la tarde en cómodos y protegidos cochecitos adquiridos en el mercado (Bernedo-A).

Actualmente además de en el cochecito también se le pasea introducido y bien sujeto en una especie de mochila que se pone a la espalda (Elgoibar-G).