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Debido a que en las enfermedades relacionadas con la piel la observación puede hacerse directamente, ellas se han prestado siempre más a la acción de las distintas formas de la medicina popular. Se ha dicho que como el hombre sufre más por el alma que por el cuerpo, en dermatología, con frecuencia, se somatizan procesos puramente psíquicos<ref>Ángel GOICOETXEA. ''Las enfermedades cutáneas en la medicina popular vasca''. Bilbao: 1982, pp. 9-11.</ref>. 

Como remedio general de las enfermedades cutáneas se han recomendado los baños de mar y tomar el sol con moderación. En algunas localidades recuerdan que se tomaban también otros baños que eran de arcilla (Muskiz-B) y de aguas sulfurosas (Abadiano-B; Aoiz, Murchante, San Martín de Unx-N). La curación de las enfermedades cutáneas se asocia con la sangre (Agurain-A).

En los capítulos dedicados a las enfermedades de la piel se describen las más comunes así como los remedios aplicados que han sido recogidos en nuestras encuestas. A menudo una misma enfermedad recibe distintos nombres según localidades, así se mezclan las denominaciones y las descripciones de tiña y sarna; sarna, eczema y herpes; eczema y psoriasis; urticaria y psoriasis, granos y diviesos... Según señala Ángel Goicoetxea las enfermedades cutáneas son una de las especialidades médicas en que el número de sinónimos para una misma enfermedad es más numeroso, caracterizándose además por la gran similitud entre ellas lo que hace difícil, incluso para el especialista, diferenciarlas unas de otras<ref>Ángel GOICOETXEA. ''Las enfermedades cutáneas en la medicina popular vasca''. Bilbao: 1982, pp. 11-12. La misma idea viene expresada también en ERKOREKA, Antón. ''Analisis de la medicina popular vasca''. Bilbao: Instituto Labayru-Caja de Ahorros Vizcaina, 1985, p. 205.</ref>.
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'''LESIONES DE LA PIEL'''

Con carácter general conviene advertir que las lesiones cutáneas presentan gran similitud entre sí por los daños, destrozos y señales que causan en la piel y otro tanto ocurre con los tratamientos aplicados que también guardan semejanza. Así se constata que el agua, el jabón, el aceite y la manteca, la cebolla e incluso las plantas que se utilizan como remedios sirven indistintamente para heridas, quemaduras, cortes o grietas de la piel.
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