Cambios

Modos de enterramiento

No hay cambio en el tamaño, 07:05 15 feb 2019
sin resumen de edición
El modo más sencillo y primitivo que recuerdan nuestros informantes es el enterramiento en foso de tierra rematado por túmulo también de tierra, en cuya cabecera se coloca un monumento de piedra, estela o cruz ''(gurutzia ''en SaraL). Este que describimos en primer lugar, es considerado en aquellas localidades donde se ha experimentado una notable transformación en el tipo de tumbas hasta generalizarse los panteones y no hay problemas de espacio en el cementerio, como el modelo típico de familias que disponen de pocos recursos. Pero también ocurre que en algunas poblaciones sigue siendo tradicional efectuar enterramientos en tierra y así lo hacen todos los vecinos independientemente de su situación económica. Dentro de este tipo, el material utilizado para la elaboración del monumento funerario, generalmente una simple cruz, marcaba así mismo diferencias.
A medida que el poder adquisitivo aumenta se advierte una mayor presencia del monumento de piedra, ''hilarria'' (Zunharreta-Z, Baigorri, Heleta, Izpura, Lekunberri, Arberatze-Zilhekoa -BN, Goizueta-N), ''hilerriak ''(Santa-Grazi-Z). La piedra es considerada como algo que perdura y que mantiene vivo el recuerdo de aquél o aquéllos que se han ido. A principios de siglo el enterramiento en tierra se remataba con losa, y cruz o estela de piedra. Este modelo es considerado actualmente como el típico vasco en el País Vasco continental. Toda casa con medios económicos sustituía en lo posible los túmulos anteriores por un monumento de este tipo.
A mediados de este siglo, en la parte peninsular del país se sustituye el sistema de enterramiento directamente en tierra por otro en el que el ataúd se coloca en un espacio construido especialmente para el caso. Se generaliza entonces el enterramiento en panteones. Esta construcción permite inhumar de cuatro a seis cadáveres en menor extensión de terreno, lo que posibilita el ahorro de espacio en zonas donde es escaso y a su vez caro.
127 728
ediciones