Cambios

Saltar a: navegación, buscar

Evolucion en las formas de transportar el cadaver

113 bytes añadidos, 10:37 9 ene 2019
sin resumen de edición
En Ataun (G), en tiempos pasados, al cadáver se le conducía en el féretro, llamado ''illoia, ''cama mortuoria. Ya en los años veinte no se utilizaban andas ni angarillas con esta finalidad. Las angarillas servían para trasladarles a casa a los heridos o muertos por accidentes de trabajo y en casos urgentes las improvisaban con escaleras de mano. También en Oiartzun (G) las angarillas tan sólo se utilizaban para el traslado de los muertos por accidente. Ya en los años veinte el cadáver se transportaba en el féretro<ref>AEF, III (1923) pp. 116-117 y 79.</ref>.
 
[[File:FIGURA.png|RTENOTITLE_FIGURA]]
En Zeanuri (B), la costumbre recogida es similar a la de estas dos localidades guipuzcoanas. Las angarillas, ''andak, ''se han usado para llevar el cadáver a casa o al depósito de cadáveres en casos de muerte por accidente en el monte o en el río. Los informantes no han conocido las ''andak ''para conducir el cadáver a la iglesia y al cementerio, lo usual ha sido llevar el cadáver en caja o ataúd.
En Lagrán (A), en ocasiones, se solía llevar el cadáver, sin caja, en unas andas muy lujosas, pintadas de negro que se custodiaban en la iglesia. Esto sucedía con los pobres o con aquellas personas que habían testado que se les enterara sin caja<ref>Gerardo LOPEZ DE GUEREÑU. “Muerte, entierro y funerales en algunos lugares de Alava” in BISS, XXII (1978) p. 197.</ref>.
En Sangüesa (N), la manera más antigua de conducción del cadáver era que lo llevaran seis portadores agarrando con la mano las asas de la caja. Después se impuso la costumbre de llevar el féretro mediante unas andas sobre los hombros de cuatro personas. Hacia 1950 desaparecieron las andas y lo llevaban directamente al hombro entre cuatro portadores. Pocos años más tarde se comenzó a trasladar el cadáver en el coche funerario.  [[File:FIGURA.png|RTENOTITLE_FIGURA]]
En Artajona (N), antiguamente había dos formas de llevar la caja: agarrada de las asas, envueltas con unas toallas blancas, con el brazo estirado o sobre el hombro protegido con un paño o «toalla» blanco con flecos. También en Aria (N) antiguamente el ataúd era transportado a mano pero como resultaba muy cansado y dificultoso se pasó a hacerlo a hombros.
En Obanos (N), tanto en tiempos pasados como ahora, se traslada a hombros. Antes, cuando se iba hasta el cementerio andando, una vez despedida la comitiva se llevaba el féretro agarrado de las asas.
En Zerain (G), a finales del pasado siglo, trasladaban el cuerpo en andas, ''illoia. ''Consistían en dos largueros, ''adarrak, ''de roble, fuertes y redondeados que en medio llevaban clavada una madera de unos dos metros de longitud y de la que los agarraderos sobresalían medio metro aproximadamente. Tenían dos o tres pares de correas para sujetar al difunto, al que se le ponía una almohadilla para reposar la cabeza, las andas se revestían con un paño denominado ''illoi-izara ''y el cuerpo se cubría con un sudario ''il-oiala. ''A veces las dificultades de los caminos y las cuestas obligaban, a pesar de los correajes, a sujetar el cuerpo por la cintura con un lienzo blanco. Después pasaron a cargar el féretro al hombro, haciendo todo el recorrido andando. En los años noventa, los caseríos próximos a la plaza siguen con la tradición de llevar el cuerpo a hombros pero las restantes casas delegan todas las labores en la funeraria, limitándose al traslado a hombros en los momentos de la introducción y salida del cadáver de la iglesia y al llevarlo al camposanto.
En Arberatze-Zilhekoa (BN), antiguamente, el cadáver era llevado a hombros sobre angarillas, ''brankarra. ''La carroza fúnebre tirada por caballos se introdujo por los años 30. Entonces se colocaba el féretro encima del carro, desde la salida de la casa, y se arrastraba a lo largo de todo el recorrido. Cuatro vecinos, ''lehenauzoak, ''se encargaban de este trabajo. Al ser menos penoso el traslado en estas condiciones, la gente decía que llevar el cuerpo en carroza, ''korbiara ''(fr. ''corbillard), ''era un alivio.
En Lekunberri (BN), si la persona fallecida vivía en una casa situada en el monte, el cuerpo se bajaba en carro o sobre angarillas llevadas a hombros hasta la alcaldía de la localidad y allí se formaba el cortejo fúnebre.
En Iholdi (BN), antes, el féretro era transportado a hombros de los anderos, ''hilketariak. ''A veces el traslado del cadáver hasta el núcleo también se hacía en carreta. Cuando las casas estaban alejadas de la parroquia el transporte a hombros, aunque fueran seis los conductores, era cansado para ellos ''y ''costoso para la familia que tenía que añadir seis bocas a la lista de gente a la que tenía que dar de comer con motivo de las exequias. Por los motivos citados se introdujo la costumbre de trasladar el cuerpo en carroza fúnebre, innovación que fue acogida favorablemente por la gente. A partir de la década de los sesenta ya se comenzó a transportar el cadáver en coche y el cortejo era también de automóviles. De esta guisa llegaban hasta la entrada del núcleo urbano que era donde se formaba la comitiva propiamente dicha en vez de en la casa mortuoria como se había acostumbrado hasta entonces<ref>Jean HARITSCHELHAR. “Coutumes funéraires à Iholdy (Basse­Navarre)” in ''Bulletin du Musée Basque''. Nº 37 (1967) pp. 112-113.</ref>. En Azkaine (L), antiguamente, las angarillas con el féretro eran llevadas a hombros, ''espaldetan. ''Una vez la comitiva en el porche de la iglesia, se depositaban las angarillas y se llevaba la caja sujetándola con las manos por las empuñaduras. Después el carro ocupó el lugar de los anderos y finalmente fue desplazado por el coche municipal.
En Azkaine (L), antiguamente, las angarillas con el féretro eran llevadas a hombros, ''espaldetan. ''Una vez la comitiva en el porche de la iglesia, se depositaban las angarillas y se llevaba la caja sujetándola con las manos por las empuñaduras. Después el carro ocupó el lugar de los anderos y finalmente fue desplazado por el coche municipal[[File:FIGURA. png|RTENOTITLE_FIGURA]]
En Bidarte (L) el cadáver se transportaba a hombros de los anderos. Hacia 1945-50 hizo su aparición el carruaje arrastrado a mano. Finalmente se ha introducido la modalidad de transportar el féretro en automóvil. Durante algún tiempo convivieron los dos medios de transporte, el carro y el vehículo.
127 728
ediciones