127 728
ediciones
Cambios
sin resumen de edición
La costumbre de ofrendar pan en tiempos pasados fue común en todos los territorios51, si bien, a tenor de los datos que hemos utilizado, esta tradición se perdió con anterioridad en Vasconia continental, sustituyéndose por la AEF, III (1923) p. 102. 51 territorios<ref>Vide apartado «El “El pan de ofrendas. ''Olata» Olata''” in ''La Alimentación doméstica en Vasconia. ''. Bilbao, 1990, pp. 148-152. </ref>, si bien, a tenor de los datos que hemos utilizado, esta tradición se perdió con anterioridad en Vasconia continental, sustituyéndose por la ofrenda de luces y aparece más desvanecida en el sur de Navarra.
Que el empleo de pan o cereales sirviera como pago de los oficios religiosos fúnebres se perdió hace mucho tiempo, sustituyéndolo por dinero o mitigando la obligación de la entrega de pan. Fue objeto de frecuentes controversias a las que se puso fin mediante acuerdos amistosos establecidos entre las autoridades civiles y eclesiásticas de cada localidad.
A finales del siglo XVIII, concretamente con fecha 12 de septiembre de 1797, la Villa de Bilbao y su Cabildo Eclesiástico firmaron una ''Escritura de Concordia ''sobre derechos de funerales y abolición de la ofrenda de pan. Se trataba de sustituir ésta conmutándola en dinero. La razón última estribaba en la dificultad que tenía la gente humilde para ofrendar pan, según se deduce del propio texto del acuerdo que dice «la absoluta abolición de la ofrenda de pan sobre que siempre han suspirado y clamado amargamente por ser la ruina de los más pobres artesanos... »<ref>''Escritura de Concordia entre la M.N. Villa de Bilbao, y el Venerable Cabildo Eclesiástico de ella, sobre derechos de funerales... 1º de Abril de 1799''. Bilbao, 1799, p. 6.</ref>.
En nuestras encuestas se ha recogido la vigencia de la ofrenda del pan ritual que se fue desvaneciendo paulatinamente en unos lugares y otros. Este periodo va desde finales del siglo pasado (año 1880) en que se dejó de ofrendar en Otxagabia (N) hasta la década de los setenta en que desaparecieron los últimos vestigios en Aramaio (A) y Obanos (N).
En Durango '''(B) '''se había perdido la tradición para los años treinta y en Zeanuri '''(B) '''perduró hasta esa década. En Liginaga (Z), Barandiarán constató en los años cuarenta que hacía ya algún tiempo se había desvanecido la costumbre de ofrendar pan. La guerra civil de 1936 y la postguerra trajeron dificultades para la obtención de harina por lo que en algunas localidades como Zerain (G) y Lekunberri (N) se acordó sustituirla por una cantidad de dinero equivalente. Sin embargo, en la localidad navarra mantuvieron el rito y llevaban el mismo bollo duro durante todo el año.
En la década de los cincuenta deja de hacerse la ofrenda de pan en Lemoiz (B) y en los sesenta en Elosua (G) y Lezaun (N). En algunas poblaciones de Bizkaia y Gipuzkoa, en los años sesenta, todavía abría el cortejo la mujer portadora de la ofrenda señalada, denominada ''aurrogia, ''el pan que que se lleva delante, pero pronto desapareció. Hasta 1967 se conservó la costumbre en Sangüesa (N) y en los setenta desapareció en Obanos (N) y en Aramaio (A), si bien en el casco urbano de esta última localidad había dejado de ofrendarse pan ya por los cuarenta.
En Abaurrea Baja (N), en el año 1970, todavía se conservaba un banco cuyo respaldo tenía en uno de sus extremos una especie de bandeja de forma circular que era precisamente el lugar donde se depositaban las ofrendas de pan.