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Ejemplos de poblamiento disperso

267 bytes añadidos, 11:30 25 oct 2018
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La población dispersa, en cambio, plantea más matices, ya que a pesar de observarse en amplias zonas de la franja septentrional, a menudo es posible ver pequeñas agrupaciones de casas en torno a la iglesia que llegan a formar una plaza. Este pequeño núcleo suele tener servicios como el médico, la tienda y la taberna. Además en el fondo de los valles, junto a los ríos y principales vías de comunicación, se encuentran núcleos más grandes que además han experimentado un notable crecimiento a lo largo del siglo XX. Por lo tanto el poblamiento disperso se limita a la zona más rural de esos municipios. A diferencia del netamente concentrado existen variadas formas intermedias dentro de la dispersión como la que consiste en pequeños barrios de casas agrupadas, a veces en torno a una ermita, que a su vez se hallan repartidos por todo el territorio. Esta variación forma una especie de gradiente, lo que complica la clasificación, es más, como ha quedado dicho, en un mismo municipio pueden hallarse zonas de neto poblamiento disperso y otras en que las casas se agrupan en barriadas o en cascos de carácter urbano.
Como afirma Barandiaran las construcciones rurales son las casas verdaderamente populares que muestran más claramente su dependencia del ambiente geográfico<ref>José Miguel de BARANDIARAN, . “Los establecimientos humanos en el Pirineo Vasco”in ''Revista de la Academia de Ciencias Exactas'', cit., XVI (1932) p. 364.</ref>.
En Sara (L) los establecimientos humanos, unos permanentes, ''etxe'', y otros temporales, ''xola'', ''etxola'', se hallaban dispersos. Existían dos pequeñas aglomeraciones en las que las casas eran contiguas o casi contiguas: Plaza e Ialarre, formando calle. Aquí vivían todos los comerciantes locales, los oficiales y el personal administrativo. En los barrios de Lehenbizkai, Egimear e Ixtillarte se hallaban cercanas entre sí, pero no tanto como en los de Plaza e Ialarre<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Bosquejo etnográfico de Sara, III” in AEF, XIX (1962) pp. 47-48.</ref>.
En Ainhoa (L) el núcleo o burgo se llama ''karrika ''y los distintos barrios, ''kartierrak''. Se pueden encontrar tres tipos de casas: en el núcleo, ''karrika'', que es una bastida, se encuentran casas particulares, largas y estrechas, con un jardín alargado; es un tipo de casa ligada a la estructura de parcelamiento medieval. Un segundo tipo responde a las casas laburdinas clásicas, que por no estar los solares tan condicionados por la parcelación, permite que las casas sean más anchas. Hay un tercer tipo constituido por antiguas bordas transformadas.
En Iholdi (BN) el sistema de poblamiento era de casas dispersas por todo el territorio. Cada una tenía cerca las tierras que le pertenecían y que eran cultivadas y explotadas por ella<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Para un estudio de Iholdi. Notas preliminares” in ''Homenaje al Dr. José María Basabe. Cuadernos de Sección. Antropología Etnografía''. Tomo V. Donostia-San Sebastián: 1987, p. 89.</ref>.
En Heleta (BN) el sistema de población es disperso salvo en la zona central donde se halla un grupo de edificios entre los cuales cabe señalar la iglesia, las escuelas, el ayuntamiento y el restaurante; además de una plaza rodeada de casas con un frontón en un lado. Las viviendas se hallaban, salvo las del pequeño casco de población, próximas a sus terrenos de labrantío. En cuanto a la situación de algunas de ellas, se veía que los pastos de los terrenos comunales habían tenido su influencia. Lejos de las casas se hallaban las bordas para el ganado que pacía en el monte<ref>José Miguel de BARANDIARAN. “Notas sueltas para un estudio de la vida popular en Heleta” in AEF, XXXIV-XXXV (1987- 1989) pp. 65-66.</ref>.
En Donoztiri (BN) salvo las familias del herrero, del maestro, de la maestra y del cura, la población era labradora y en los años cuarenta del siglo XX cuando Barandiaran recogió estos datos contaba con 500 habitantes. Vivían en 86 casas dispersas por casi todo el territorio. Sólo las partes altas de las montañas no se hallaban pobladas. Cada casa se situaba próxima a sus terrenos. Era la forma típica del ''baserri ''o ''borda''. A veces la situación de la casa estaba determinada no sólo por sus tierras sino también por los montes comunales donde se alimentaba su ganado. Así, la casa ''Mendiburuko borda ''estaba en el límite superior de sus tierras de cultivo y en el inferior de los terrenos incultos del monte Garralda, donde pacían sus ovejas<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Rasgos de la vida popular de Dohozti” in ''El mundo en la mente popular vasca''. San Sebastián: 1962, pp. 19-21.</ref>.
[[File:2.15 Zuberoa.JPG|frame|Zuberoa. Fuente: Michel Duvert, Grupos Etniker Euskalerria.|class=nofilter]]
En Liginaga (Z) la forma de población predominante es de casas dispersas por el territorio. Existen, sin embargo, dos pequeñas agrupaciones de casas casi contiguas, ''karrika'', que son las de Astüe y Liginaga<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Materiales para un estudio del pueblo vasco. En Liginaga (Laguinge)” in ''Ikuska'', I (1947) p. 127.</ref>.
En Navarra la zona de los caseríos o casas diseminadas por el campo, fuera del núcleo básico de población, se da en la zona atlántica, pero con cierta irregularidad. Los hay en las cinco villas, en Goizueta, en el Baztan y Bertiz, en Doneztebe y su tierra. Pasada la divisoria de aguas hacia el sur ya es menos común el sistema, que vuelve a aparecer en Luzaide/Valcarlos. Estos caseríos son de dos clases: los ''fuertes'', con troncalidad y vecindad, y los más pobres o débiles en construcción y tierras, originados, a veces, en las ''bordak ''pastoriles<ref>Julio CARO BAROJA, . ''Etnografía histórica de Navarra'', op. citTomo III.Pamplona: 1972, p. 154.</ref>.
La Villa de Lesaka (N) está compuesta por varios barrios formados por multitud de caseríos diseminados en lo más profundo de los valles y en las cumbres de los montes. Generalmente están situados en la linde de algún camino al que casi nunca da su fachada principal, pues delante de ésta solían tener una pequeña extensión bordeada de castaños, nogales, etc., en la que colocaban los almiares, ''metak'', de helecho o heno. Los terrenos de labranza propios se hallan al lado de la casa. El casco de la villa está formado por dos antiguos barrios llamados Legarrea y Piku-Zelaia, separados por el río Onin<ref>IdemJulio CARO BAROJA. “Algunas notas sobre la casa en la Villa de Lesaka. La arquitectura en la casa lesakarra” in AEF, IX (1929) p. 77.</ref>.
En Ezkurra (N) la casa situada en el casco de la población se llama ''etxe ''y la situada fuera de él ''borda''. Cuando Barandiaran realizó esta encuesta había cuarenta y cinco casas agrupadas desordenadamente; fuera aparecían dispersos por el territorio treinta caseríos<ref>José Miguel de BARANDIARAN. “Estudio etnográfico de Ezkurra” in AEF, XXXIV-XXXV (1987-1989) p. 44.</ref>.
En Kortezubi (B) los caseríos se hallan distribuidos en cofradías, ''amarreko'', cuya división corresponde a diferencias geográficas del terreno que ocupan. Estas cofradías son ocho y estaban formadas por un número reducido de casas habitadas por labradores. Las casas se hallaban separadas unas de otras: en Terliz había algunas que sólo distaban entre sí unos veinte metros pero en Basondo las había separadas por doscientos metros y más. Aún en la Cofradía de Enderika, donde el núcleo de la población era más condensado, raro era el caso de dos casas contiguas<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Pueblo de Kortezubi (Bizkaia). Barrios de Basondo y Terliz. Los establecimientos humanos y las condiciones naturales” in AEF, V (1925) pp. 45-46, 56.</ref>.
[[File:2.16 Croquis de los barrios de Terliz (Terlegiz) y Basondo Kortezubi (B) 1925.jpg|frame|Croquis de los barrios de Terliz (Terlegiz) y Basondo, Kortezubi (B), 1925. Fuente: José Miguel Barandiaran, Grupos Etniker Euskalerria.]]
La población de Ataun (G) se halla diseminada por las vertientes y barrancos de la zona montuosa que forma la cuenca del río Agauntza, en las estribaciones occidentales de la sierra de Aralar. Se trata de una larga y estrecha vega. Es de notar que en los sitios en que hay confluencia de dos ríos o bifurcación de caminos que conducen a barrios o pueblos de alguna importancia, se forman núcleos de población más condensada. La mayor parte de las casas estaban situadas en una estrecha vega, generalmente separadas unas de otras por distancias de más de cincuenta metros. Sólo unas pocas se hallaban agrupadas; éstas no eran casas de labranza. La forma de la localidad en lo que se refiere a la distribución de viviendas en el campo estuvo adaptada a las exigencias de la economía rural. La casa ocupaba el sitio más próximo a las tierras de su propiedad. Las habitadas por familias que se dedicaban a la labranza y al pastoreo a la vez eran casos de interferencia de ambas formas sociales y como tales ocupaban muchas de ellas un sitio intermedio entre los terrenos de labrantío y pastizales<ref>José Miguel de BARANDIARAN. “Contribución al estudio de la casa rural y de los establecimientos humanos. Pueblo de Ataun. Barrios de Arinberriaga, Murkondo, Arrate-kale y Ugaldekarrika. Los establecimientos humanos y las condiciones naturales” in AEF, V (1925) pp. 1, 2 y 9.</ref>.
En el barrio ataundarra de San Gregorio (G) en 1900 había noventa y dos caseríos o ''baserri-etxe ''de labradores y ganaderos, además de treinta casas de ''aittelume ''o familias sin tierras ocupadas por artesanos, industriales y comerciantes. Eran casas dispersas por el territorio, salvo una docena que formaban tres grupos de edificios contiguos o muy próximos unos a otros y veintiocho de dos viviendas cada una<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Aspectos de la transición contemporánea en la cultura del pueblo vasco” in ''Etnología y tradiciones populares''. Zaragoza: 1974, p. 10.</ref>.
En Sasiola, Astigarribia, Olaz, Mijoa y Galdua (Deba-Mutriku-G) la casa ocupaba un sitio próximo a las tierras de su propiedad; por eso la población se hallaba diseminada. Los caminos vecinales no pasaban generalmente por delante de los portales de las casas, no parecía, pues, que hubiesen influido ni en la situación ni en la orientación de éstas. Las habitadas por familias que se dedicaban a la labranza y al pastoreo a la vez ocupaban un sitio intermedio entre los terrenos de labrantío y los pastizales. Estos caseríos se situaban en las zonas más altas, donde la manutención de las ovejas era más fácil por la proximidad de los terrenos comunales debido a la abundancia de hierba<ref>IdemJosé Miguel de BARANDIARAN. “Establecimientos humanos y toponimia. Barrios de Sasiola, Astigarribia, Olaz, Mixoa y Galdua (Deva-Motrico)” in AEF, VIII (1928) p. 14.</ref>.
En Itziar (G) el sistema de poblamiento predominante es de casas dispersas. En el casco de la población había treinta viviendas formando una pequeña agrupación llamada Beko-kalea (la calle de abajo) en la proximidad de la iglesia, las escuelas y la casa consistorial. En otra agrupación situada a oriente de la anterior de nombre Goiko-kalea (la calle de arriba), había catorce casas. Sólo cinco edificios servían de cobijo a dos familias cada uno. La casa estaba casi siempre al lado de sus tierras<ref>José Miguel de BARANDIARAN. “Etnografía de Itziar” in AEF, XXXII-XXXIII (1984-1986) pp. 17-18.</ref>.
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