127 728
ediciones
Cambios
sin resumen de edición
Le sigue en importancia la harina de maíz; sin embargo, su uso no estuvo tan generalizado ni tan extendido como el de la de trigo, siendo más frecuente en la vertiente cantábrica.
Durante los periodos de penuria, como en la guerra y la postguerra, el consumo de harina de maíz se incrementó. Asimismo se agregaba patata a la harina de trigo y se utilizaban otros tipos de harina, como la de centeno y más raramente la de cebada, ''garagar urune ''(Alzusta-Zeanuri-B) .
El cultivo del trigo se fue abandonando progresivamente en los pueblos de la vertiente cantábrica a lo largo de la segunda mitad de este siglo; no obstante, su harina se compra en ocasiones para hacer pan en casa. El maíz, por el contrario, pese a continuarse cultivando no se suele destinar a la producción de harina para consumo humano.