Cambios

Saltar a: navegación, buscar
sin resumen de edición
Algunos de estos refuerzos se emplearon sobre todo en los barrios cercanos a los montes en los que algunos vecinos se dedicaban a acarrear madera; sin embargo los empleados casi en exclusiva para transportar hierba y materias similares podían ser más simples. Por lo tanto dependiendo de la dedicación a la que iban a ser destinados se construían más o menos reforzados.
Los informantes de más edad recuerdan haber visto en su niñez carros de ruedas macizas de madera cuyo cierre perimetral no era de cartolas sino con una estructura de varas entretejidas, una especie de ''bardanasca ''que en este caso recibía el nombre de ''zarzo''. Se trataba generalmente de varas de avellano dispuestas en torno a unos palos gruesos, verticales y separados por trechos uniformes, llamados rejones, que sobresalían del tejido en sus extremos<ref>Estas estructuras de varas entretejidas se han utilizado en tabiques de casas y en cierres de corrales. Vide: ETNIKER EUSKALERRIA, . “Muros interiores y tabiques. Hesiak, tabikak” in ''Casa y familia en Vasconia'', op. cit.Bilbao: 2011, pp. 319-326.</ref>. Para que el zarzo guardase su verticalidad, los extremos inferiores de los rejones, convenientemente afilados, iban encajados en sendos orificios abiertos en las andarazas o piezas laterales del carro. La trasera se cerraba con otro pequeño zarzo hecho a medida llamado ''portillera''.
Este tipo de cierre era más liviano y económico. Cuentan que los zarzos, sustituidos por las cartolas, terminaron de ''albergue ''para las gallinas.
127 728
ediciones