Obsequios con ocasión de la matanza
Con motivo de la matanza se regala a vecinos y parientes morcillas y otras partes del cerdo. Es un acto de cortesía y a la vez expresión de vinculación y relación que en ocasiones trasciende la simple proximidad física de vecindad o parentesco. El dicho vizcaino en euskera «Odolosteak ordeaz» (Las morcillas se dan en compensación) expresa que este obsequio responde a un intercambio establecido.
Este presente, morcillas y algún trozo de magro, recibe diversos nombres según la geografía y el idioma empleado. En Carranza (B) previenda o vianda de la matanza; en Lanestosa (B) fijo-nada; en Alava presente y ración; también presente en Lezaun, Artajona, Aoiz, Monreal, Valles de Salazar y Aezkoa (N); en Allo y Mélida (N) matapuerco; en Lekunberri (N) puska; en Goizueta (N) txermonak; en Ajangiz (B) buskentz-emotea; en Aramaio (A) partizipaziño y partiziño; en Baztan (N) txerri-puxkak; en Ortzaize y Ciboure (Ip) xerri-iuxkak.
Tradicionalmente, las familias que hacen matanza de cerdo cumplimentan con este obsequio, además de a los vecinos más próximos a aquellas personas cuyos servicios son requeridos habitualmente. Así: el cura, el médico, el maestro y el comerciante del que son clientes habituales. También al matarife, si no cobraba el servicio, se le pagaba de este modo.
En Gorozika (B) llaman jaungoikoa al morcillón que dan al matarife; en Valcarlos (N) se le entrega el solomillo, azpixun. En esta última localidad también se regalaba caldo de morcilla, tripa salda, a determinadas familias. En Busturia (B) con los sesos se obsequiaba al maestro y al médico. En Elosua Bergara (G) las morcillas de oveja eran para el vecino más próximo.
El presente se llevaba en una cestilla, o más comúnmente en un plato de loza, cubierto con una servilleta o envuelto en hojas de berza. Se solía enviar por medio de alguno de los hijos de la casa, a quien los receptores daban alguna moneda de propina. Cuando se mataba un animal para cecina las obligaciones eran las mismas. Hoy todo este tipo de relaciones casi se han extinguido.