El aniversario del nacimiento
Al día del aniversario del nacimiento se le ha conocido tradicionalmente por el nombre de (zure, nire) egune (mi, tu día) en euskera y el día del santo en castellano. En los últimos tiempos se ha introducido en el área euskaldun el término urtebetetzea que es adaptación del término cumpleaños.
La expresión "día del santo" para designar el cumpleaños es reflejo de la costumbre extendida de bautizar al niño con el nombre de uno de los santos del día de su nacimiento. En Allo (N), por ejemplo, consideran que celebrar el santo de una persona es conmemorar su aniversario y no su onomástica, aunque antaño ambas cosas iban unidas con mucha frecuencia.
En Zeanuri (B) hasta hace unas décadas se le decía al niño, o al adulto, la expresión Zure egune da gaur (hoy es tu día), cuando llegaba la fecha del santo cuyo nombre había recibido. Aún hoy en día son frecuentes expresiones como Santa Ageda egunekoa da nire ama (mi madre es del día de Santa Agueda). Otra: Nire egune da baie ez dire nire urteak (es mi día -santo-pero no mi cumpleaños), vendría a expresar que la onomástica no coincide con el cumpleaños.
Por lo que respecta al día de la onomástica, en la mayor parte de las localidades encuesta-das no se celebraba a no ser que coincidiera con el cumpleaños, cosa que era frecuente teniendo en cuenta la razón antes aducida, o que se tratara de un santo relevante como San Juan, San José, San Francisco Javier o la Virgen del Pilar.
El cumpleaños y la onomástica han experimentado una gradual divergencia a lo largo del siglo, pues se ha pasado de imponer al niño el nombre del santo del día en que nacía a llamarle con nombres vascos y a veces incluso extranjeros que carecen de reflejo en el santoral.