Acné
Contenido de esta página
El acné es una afección de la piel que se caracteriza por la aparición de pequeños granos provocados por la inflamación de las glándulas sebáceas. Se manifiesta sobre todo en la cara, es propio de la adolescencia o de la juventud por lo que se le conoce también con el nombre de “acné juvenil”. Al no presentar ordinariamente gravedad tampoco se ha dado importancia ni al cuidado ni a los remedios aplicados según se desprende de los datos recogidos en nuestras encuestas. En ocasiones la gente mayor ha bromeado incluso con las personas a las que se les manifestaba indicando que el padecerlo era síntoma de vitalidad y juventud.
Remedios
En Elosua (G) en un litro de agua se echa un puñado de pasmo-belarra, se cuece hasta que quede reducido a la mitad, se cuela y se conserva en una botella bien cerrada. Todas las mañanas hay que tomar una cucharada en ayunas. En Aoiz (N) señalan que hay que recurrir a productos que sirvan para depurar la sangre. Se recoge en el campo achicoria borte, se cuecen las hojas y cuando están aún calientes se exprimen en un colador o en un paño retorciéndolo. Hay que tomar este jugo. En Durango (B) se recomienda lavarse la cara con un jabón neutro, del tipo que se usaba en el lavado de ropa. En esta localidad vizcaina y en Vasconia continental para curar el acné juvenil se aconsejaba frotarse la cara con la propia orina[1].
Hoy día para paliar los efectos del acné es común la recomendación de hacer una alimentación sana, evitando grasas y dulces. Entre los alimentos menos convenientes figuran el chocolate y el chorizo; entre los más aconsejables, la fruta y la verdura (Mendiola-A). También se recurre a cremas de farmacia y a centros de estética.
- ↑ DIEUDONNÉ. “Medécine populaire au Pays Basque” in Gure Herria. Tomo XXVI. Bayonne: 1954, p. 203.