Uso de objetos auxiliares
A menudo interviene otra persona que con la ayuda de un pañuelo o un papel de fumar consigue extraer el cuerpo extraño del ojo. En caso de que el afectado intente poner él solo en práctica los siguientes procedimientos necesita la ayuda de un espejo.
En Carranza (B) cuando a alguien se le introduce una broza en el ojo y otra persona se presta a extraérsela, utiliza para ello un papel de fumar o el pico de un pañuelo. En Apodaca (A) el acompañante recurre a la punta de un pañuelo o a un papel bien limpio. El paciente abre cuanto puede el ojo y quien le ayuda se lo mantiene abierto con sus dedos mientras con la punta del pañuelo intenta sacar el cuerpo extraño. También se recurre a la punta de un pañuelo en Amézaga de Zuya, Berganzo, Bernedo, Mendiola, Pipaón, Ribera Alta, Valdegovía (A); Abadiano, Bedarona (B); Beasain, Berastegi, Bidegoian, Elosua, Oñati, Zerain (G); Allo, Aoiz, Arraioz, Eugi, Goizueta, Izurdiaga, Lezaun, Murchante, Obanos, San Martín de Unx, Sangüesa, Valle de Erro y Viana (N). A veces la punta del pañuelo se humedece con saliva (Mendiola-A; Bermeo, Nabarniz-B; Elgoibar-G) o con agua (Mendiola). En Hondarribia (G) el pañuelo debía de ser de hilo.
En lugar del pañuelo también se ha recurrido a un papel de fumar (Mendiola-A; Hondarribia con el papel liado en forma de canutillo, Oñati-G; Viana, San Martín de Unx y Sangüesa-N, si se trata de un mosquito).
En Amézaga de Zuya (A) consideran que lo ideal es utilizar la punta de un pañuelo o una cerilla con la cabeza ablandada. Se ahueca el párpado superior, debajo del cual se introduce el inferior, sosteniéndolo con el dedo. Con la otra mano, por medio del moquero o del fósforo, se trata de extraer el cuerpo extraño.
En Moreda (A) recomiendan abrir el ojo en el que se ha introducido la porquería todo lo que se pueda levantando las pestañas. Luego con la puntita de un pañuelo de algodón, nunca con los dedos, se arrastra la porquería del ojo hasta sacarla. En menor medida algunos emplean una carta o cartón doblado o también pinzas.
En Muskiz (B) con una moneda se da vuelta al párpado. Se pone la moneda de canto sobre el párpado, al mismo tiempo se sujetan las pestañas sobre la moneda, se estira un poco y se da vuelta; luego con papel de fumar enrollado y un poco húmedo por la punta o con un pañuelo se extrae la porquería. En Tiebas (N) se le da igualmente vuelta al párpado y con la puntica de un pañuelo se saca.
Para extraer los cuerpos extraños también se ha recurrido a un algodoncito (San Martín de Unx-N), a una pinza de ojos (Mendiola-A) o al mismo dedo (Abadiano-B, Obanos-N). En Lekunberri (N) el dedo se envolvía en un pañuelo fino que, a poder ser, debía ser de hilo. En Sangüesa (N) se procura extraer con la ayuda de una varilla de cristal. En Arrasate (G) con una lanceta o bien con un palito convenientemente preparado de modo que quede muy fino, como un mondadientes.
En Elgoibar (G) muchos acudían a un caserío de la localidad donde un vecino extraía las porquerías de los ojos sirviéndose de la punta de una navaja.
En esta localidad también se emplea una pluma especial que se halla en el ala de la becada o sorda, la cual se introduce en el ojo a modo de pincel al objeto de arrastrar el cuerpo extraño. En Hondarribia (G) se recurre igualmente a la última pluma de la becada, que es muy suave. En Muskiz (B) aseguran del mismo modo que el mejor instrumento para extraer porquerías de los ojos es una pluma especial de la sorda; esta ave tiene una en cada ala. En Arrasate (G) se empleaba la pluma de un ave y en Liginaga (Z) también plumas finas de ave.
En Bidegoian (G) se utiliza una especie de aguja que parece que es de gelatina y que se extrae del pico de la becada una vez muerta. Es muy apropiada para sacar cuerpos extraños del ojo, pero en todas las casas no se dispone de ella.
En Beasain (G) cuando el cuerpo extraño se clavaba en el ojo se cortaba al biés la punta de una pluma de gallina y uno que tuviera buena vista y buen pulso, intentaba arrancar el objeto mediante un movimiento lateral. Había que tener práctica porque de lo contrario se podía provocar una avería seria. En Abadiano (B) cuando a un niño le entraba en el ojo una porquería la madre se la extraía con la lengua.
En Beasain también se ha utilizado el procedimiento de cubrir el ojo afectado con un trozo de la corteza inferior del pan, mojada en agua y espolvoreada con azúcar, para que expulse el cuerpo extraño.
En Lekunberri (N) en cualquier caso consideran que el mejor colirio para aliviar estas molestias es el agua de rosas, que se obtiene introduciendo pétalos de dicha flor en agua.