Tipos de vómito

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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Los vómitos más comunes son los derivados de algún problema del aparato digestivo, como consecuencia de dolor de tripas o de que ha sentado mal una comida, y consisten en devolver lo que está alojado en el estómago. Junto a los vómitos gástricos, las encuestas han señalado los cólicos biliares. Para cólico se han recogido en Donibane-Lohitzune (L) las denominaciones erraietakoa y sabela.

En Lekunberri (N) asocian los vómitos biliares a problemas hepáticos que se materializan en la expulsión de bilis por la boca; en Obanos (N) precisan que lo que se expulsa es un líquido amarillento o verdoso y la expresión utilizada en estos casos es “ha tenido una vuelta de hígado” y en Oñati (G) lo hacen extensivo a quienes sufren de la vesícula que por las mañanas devuelven bilis.

Tampoco se excluyen otras causas para expulsar bilis. Así en Amézaga de Zuya (A) se ha recogido que los dolores de cabeza y los cólicos, a veces, traen consigo vómitos muy fuertes en los que “se echa hasta la bilis”, y en Durango (B) y en Aoiz (N) señalan que se pueden producir por mareos de coche o enfermedad y al estar el estómago vacío, se expulsa bilis. En Elgoibar (G) dicen que el vómito que se expulsa en ayunas es bilis, bilixa.

Un tercer grupo de vómitos que han consignado las encuestas son los vómitos de sangre. En Apodaca y Moreda (A) popularmente se suele pensar que detrás de ellos hay causa grave. En Mendiola, Ribera Alta (A); Durango (B) y Beasain (G) lo consideran alarmante y dicen que pueden ser síntoma de tisis o tuberculosis; suele manifestarse en forma de flemas de sangre. En Ribera Alta añaden que si los vómitos eran muchos y seguidos podía ser indicativo de padecer tifus. También se han apuntado otras posibles causas como la de ser expresión de una hemorragia interna (Muskiz-B, Hondarribia-G, Murchante-N) o consecuencia de padecimiento de úlcera (Bidegoian, Elgoibar-G; Tiebas-N).

Las encuestas apenas han mencionado remedios para estos casos. En Murchante después de los vómitos biliares y cualquier dolor de hígado recomiendan tomar achicorias silvestres (Cichorium intybus) sin cocer o preparadas como cualquier verdura y aliñadas con aceite y vinagre. En Oiartzun (G), según se recogió en los años veinte, cuando uno echaba sangre por la boca, un remedio eficaz y de rápido efecto era beber la decocción de hojas de nogal negro, intxaur beltzen ostoak[1].


 
  1. Recogido por Florencio PORTU: LEF. (ADEL).