Evitación del embarazo
En las localidades encuestadas se ha recogido con carácter general que la mujer ha solido tomar algunas medidas para evitar los embarazos no deseados. En las primeras décadas del siglo XX los modos más utilizados de soslayarlos eran el coitus interruptus, conocido popularmente con las denominaciones de “marcha atrás” (Moreda, Pipaón-A) o “tirarse en marcha” (Muskiz-B); el método Ogino, consistente en calcular los días del mes en los que la mujer era fértil para evitar practicar el acto sexual en esas fechas; la abstención para la que se ha recogido la expresión “lan orietan ez ibiltzea” (no andar en esos menesteres) (Ezkio-G), y el condón. El preservativo se ha conocido con nombres irónicos como txapela (Ezkio) o calcetín de viaje (Carranza-B). En Muskiz antiguamente había personas que creían que la mujer podía quedar embarazada con un beso y se ha recogido el dicho popular “Los besos no hacen chiquillos pero tocan a vísperas”.
En algunos lugares se ha consignado que no se producían embarazos mientras se estuviera amamantando, por lo que las mujeres prolongaban el amamantamiento hasta que el niño cumpliera los dos años (Bernedo-A, Telleriarte-G).
De mediados de los años cincuenta en adelante la mujer recibe mayor asistencia médica y conoce mejor los ciclos menstruales, pero es principalmente desde los ochenta cuando tiene información más precisa para evitar los embarazos, aunque este dato no tenga validez para todo el territorio en la misma época ni se expandiera por igual en núcleos urbanos o en zonas rurales.
Hoy en día se conocen diversos procedimientos a los que recurren las parejas para impedir la concepción como es la píldora anticonceptiva; dispositivos intrauterinos; ligaduras de trompas o vasectomías. No parece que los jóvenes pongan reparos a la utilización de estos métodos. Las personas de edad en algunos casos han conocido tardíamente la existencia de días fértiles e infértiles para la concepción y se sorprenden del cambio respecto de los tiempos que ellos vivieron puesto que actualmente hasta la propia televisión anuncia métodos anticonceptivos.
