Medidas cautelares
A propósito de evitar o mitigar el mal olor de los pies se han consignado en las encuestas algunas recomendaciones. Así en Muskiz (B) indican que es importante ponerse medias y calzado apropiados que faciliten la transpiración, como calcetines de lana o algodón y zapatos de cuero o alpargatas de cáñamo. Aseguran que las fibras sintéticas son muy malas para los pies. El usar calzado que tuviera suela de cuero señalaban también en Sara (L) y Bedarona (B) que evitaba, en parte, la excesiva transpiración de los pies. La recomendación de utilizar en verano calcetines de lana de oveja, artilana, se ha constatado en Astigarraga, Elgoibar (G) y Valle de Erro (N) porque según los informantes secan y no sudan tanto los pies. En Mendiola (A), Allo y Murchante (N) debido al olor que desprende el sudor se recomienda el cambio frecuente de calcetines. En esta última localidad aconsejan además calzar zapato abierto para que los pies puedan transpirar. En tiempos recientes se ha generalizado en todas partes la colocación en el calzado de plantillas que eviten el mal olor.
En Apodaca (A) señalan que con el calzado de goma (abarcas, botas de goma y katiuskas) es con el que más sudaban. Para paliar sus efectos se calzaban botas uno o dos números más grandes que las requeridas y se ponían paja dentro. Indican los informantes que a quienes más les sudaban los pies era a los pastores debido al calzado y a la poca higiene ya que se pasaban semanas sin cambiarse de calcetines. Cuando a uno le sudan los pies se suele decir “que le cantan” por el tufo que despiden; expresión esta que también se ha recogido en Moreda (A) y que es común. En Amézaga de Zuya (A) dicen que es habitual utilizar botas de goma que son buenas para el trabajo pero la piel suda mucho con ellas.
En Hondarribia (G) señalan que lo mejor es usar sandalias o alpargatas que transpiren bien. También en Oñati (G) para evitar la excesiva transpiración de los pies se cambiaba de calzado de goma a calzado de cuero o a alpargatas. En Obanos (N) dicen que antiguamente el problema era menor porque se usaba mucho alpargata de cáñamo que transpira mejor que las zapatillas deportivas de hoy.
En Zerain (G) advierten que no es bueno cambiarse de ropa en plena sudada, conviene aguardar a que el cuerpo recobre su temperatura y entonces lavarse o cambiarse.