Insolación. Eguzkiak pasatu
En Abadiano y Bedarona (B) dicen a la insolación eguzkiak pasauta, literalmente, pasado por el sol. En Arraioz (N) también iruzkia pasatua. En Goizueta (N) para indicar que una persona ha tenido una insolación se dice, eguzkia pasatu zaio, y la expresión recogida en Nabarniz (B) es “eguzkia beroak zeatz pasauta itxi dau” (ha sufrido una insolación por efecto del calor del sol).
En Allo (N), refiriéndose al afectado, que “le ha cogido el sol la cabeza” y en Lezaun (N) igualmente que “le ha cogido la cabeza el sol”.
En Abadiano (B) aseguran que el sol de primavera es el más perjudicial, “betik joan eta burua arrapetan dau”.
Cuentan los informantes de Gorozika (B) que los síntomas de la insolación suelen ser dolor de cabeza, cansancio, descomposición, mareo, escalofríos y piel quemada.
La insolación es un suceso infrecuente en la mayor parte del área estudiada ya que no es habitual que se alcancen temperaturas excesivamente altas, al menos en la mitad septentrional. Antaño fue un accidente rarísimo pues los que hoy son viejos tomaban muchas precauciones durante los trabajos estivales.
En Carranza (B) se cubrían adecuadamente la cabeza, periódicamente se refugiaban a la sombra y bebían abundante agua. Recuerdan las mujeres que además de medias llegaron a emplear manguitos de tela fina para cubrir los brazos. Aparte del temor a sufrir quemaduras solares, en este comportamiento subyacía una preocupación estética con cierto transfondo social: la mujer morena parecía más vieja y de ella se sabía con certeza que era una trabajadora; en cambio, la de cutis blanco bien podría ser una “señorita” perteneciente a un nivel social más elevado.
En Tiebas (N) también recuerdan que antaño las mujeres llevaban amplios sombreros con pañuelos y manguitos para que no les diese el sol y así estar más blancas, como las de la capital.
En Amézaga de Zuya (A) consideran que lo mejor es evitar llegar a esta situación no exponiéndose demasiado tiempo al sol o en todo caso protegiendo la cabeza con un sombrero o un pañuelo.
En Ribera Alta (A) cuando se iba a trabajar al campo siempre se llevaba la cabeza cubierta. Las mujeres con grandes pañuelos que anudaban debajo de la barbilla y los hombres con boina o un pañuelo de cuadros con cuatro nudos en las cuatro esquinas.
En Berastegi (G) tampoco recuerdan que en tiempos pasados hubiese insolaciones porque cuando se trabajaba al aire libre siempre se iba con la cabeza bien cubierta: boina en invierno y sombrero de mucho vuelo en verano.
En Elosua (G) cuando calentaba el sol y había que trabajar fuera de casa se llevaba la cabeza cubierta.
En Oñati (G) para evitar la insolación consideraban bueno llevar un sombrero de paja de ala ancha, llamado kapelea, o un pañuelo de cabeza. Pero lo mejor era mantenerse a la sombra.
En Arraioz (N) antaño las mujeres se protegían del sol con sombreros de paja y los hombres con boina. Hoy en día no hay tanta costumbre en las mujeres de usar sombrero, sin embargo los hombres siguen empleando boina.
En Lekunberri (N) para trabajar en el campo se llevaban sombreros de paja o pañuelos para cubrir la cabeza.
En Hondarribia (G) dicen que en tiempos pasados no había insolaciones porque los días de mucho calor la gente se refugiaba a la sombra o en casa y en aquellos tiempos apenas se iba a la playa.
En Moreda (A) los labradores solían ir al campo bien arropados y con la cabeza cubierta con una boina o con un sombrero. Era raro que se produjesen insolaciones entre estas personas habituadas a trabajar la mayor parte del día expuestas al sol. Más casos se producen entre quienes no están acostumbrados a ir al campo. Durante los meses de más calor los labradores madrugan y para las doce del mediodía, hora en que empieza a apretar el calor, se retiran a sus casas.
En Telleriarte (G) consideran que para andar bajo el sol, ya sea para trabajar o para pasear, es conveniente llevar la cabeza protegida con la boina o un pañuelo.
Hoy día la insolación se manifiesta con una frecuencia ligeramente superior a causa de las nuevas modas. Por ejemplo algunos realizan las tareas del campo en traje de baño, a menudo sin sombrero, para ponerse morenos y se toma menos líquido ya que en buena medida se ha sustituido el agua por bebidas gaseosas y alcohólicas. Asimismo se ha generalizado la asistencia a las playas donde aún más frecuentes que las insolaciones son las quemaduras.