Cruces

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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La cruz ha sido el signo de protección por antonomasia en la cultura cristiana. Este signo puede encontrarse de muy diversas formas incorporado al edificio de una casa.

No es raro encontrar en el vértice del tejado que da sobre la fachada una cruz de hierro forjado que contiene adornos y garabatos y a la que se le ha incorporado una veleta giratoria para indicar la dirección del viento.

La cruz, símbolo de protección de la casa. Kortezubi (B), 2011. Fuente: Segundo Oar-Arteta, Grupos Etniker Euskalerria.

También podemos ver, sobre todo en algunos municipios costeros de Bizkaia, cruces de piedra que rematan el muro zaguero de caseríos cuya cubierta es a dos aguas. En estos casos el muro es ciego y sube mas arriba del techo careciendo de tejadillo o cola de milano que protege la cubierta de la fuerza del viento[1].

Cruz protectora en la puerta de entrada. Altzabeheti (Z), 1976. Fuente: Michel Duvert, Grupos Etniker Euskalerria.

Asimismo es muy frecuente encontrar cruces y anagramas (JHS), Jesus hominum Salvator, Jesús Salvador de los hombres, grabadas en las dovelas de los arcos de piedra de los portales (Astigarraga-G; Sangüesa-N) o cruces pintadas en blanco sobre el dintel de la puerta de acceso (Moreda-A) o sobre la ventana de la cocina de numerosos caseríos.

Tampoco es infrecuente ver sobre una de las vertientes del tejado una gran cruz formada con las tejas nuevas que se han incorporado para llevar a cabo un retejo general de la cubierta (Zeanuri-B; Zerain-G)[2].

Cruces protectoras en el dintel de la puerta del caserío Narbaitzagainekoa. Elosua (G), 2011. Fuente: Segundo Oar-Arteta, Grupos Etniker Euskalerria.

En el segundo decenio del siglo pasado en Kortezubi (B) en la puerta principal de la casa, o en la sala, se solía fijar una cruz hecha con cera de las velas que habían ardido en la iglesia durante el oficio de Tinieblas en Semana Santa. Reducidas a pequeñas fracciones estos trozos de cera solían ser distribuidos por el mayordomo de la iglesia entre los asistentes a la misa mayor del día de Pascua de Resurrección.

En Gorozika (B) por la misma época recogió Azkue que en días de trueno se colocaba una crucecita de cera en cada ventana, tres en la puerta mayor. Si la cera era la empleada por Semana Santa en la iglesia, tanto mejor[3].

En Zerain (G) hacían pequeñas cruces con laurel, a las que añadían unas gotas de cera derretida de vela bendita y las colocaban en las puertas de las casas como protección contra el pedrisco y el fuego.

En Agurain, Bernedo, Pipaón y Ribera Alta (A) colocaban en la puerta de entrada cruces de madera.

En Allo (N) en la misa del 3 de mayo, festividad de la Santa Cruz, algunas familias bendecían una crucecita de madera que hacían los carpinteros. Luego la colocaban en una herradura incrustada en la pared, junto a una ventana de la fachada de la casa. También en Aintzioa y Orondritz (N) colocaban una pequeña cruz de madera bendecida este mismo día.

En Artajona (N), con el fin de que no entraran brujas en la casa, se ponía en todas las ventanas una crucecita pegada en la madera, en la parte de encima de la hoja. Debía ser de cera bendita, de la vela de la Candelera.

En Izurdiaga (N) colocaban una cruz hecha de rama de avellano o de boj en la pared de la fachada de la casa. También solían poner cruces en las ventanas hechas con cera de la vela bendecida en la Candelaria.En Obanos (N) para proteger la casa o el establo en algunas puertas hay una cruz de cal o formada con chinchetas y restos de pintura.

En Viana (N) en algunas cuadras había en las paredes unas toscas cruces realizadas mediante un rayado inciso.

Ha sido común que el día de Santa Cruz (3 de mayo) se confeccionaran pequeñas cruces de avellano, urretxa, que eran llevadas a la iglesia para ser bendecidas. Luego se colocaban en la puerta del establo e hincaban en tierra en las heredades cercanas a la casa.

En Eugi (N) al terminar la casa se colocaba una cruz de madera en el tejado. Igual costumbre había en Astigarraga (G).


 
  1. Ernesto Nolte ofrece un detallado catálogo de estas cruces de piedra: “Cruces y monolitos de piedra en tejados (parte zaguera) de caseríos vizcaínos y sus paradigmas” in Kobie. (Serie Etnografía). Núm. 1. Bilbao, 1984, pp. 17-67. “Nuevos ejemplos de cruces de piedra en tejados (parte zaguera) de caseríos guipuzcoanos y vizcaínos” in Munibe. Núm. 42. San Sebastián, 1990, pp. 469-472. Cfr. También Michel DUVERT. “Etxe et croix en Iparralde” in Kobie. Antropología cultural. Núm. 12. (2006/2007) p. 535.
  2. En el capítulo dedicado a la ornamentación de la casa se tratan más extensamente algunos aspectos citados en los últimos párrafos, como las cruces del tejado y los anagramas JHS. A tal fin, se pueden consultar los apartados relativos a adornos del tejado, puertas y ventanas.
  3. Resurrección M.ª de AZKUE. Euskalerriaren Yakintza. Tomo I. Madrid: 1935, p. 173.