Tejado
En varias poblaciones de Bizkaia y Gipuzkoa se ha constatado la costumbre de colocar cruces en la parte más alta del tejado.
En Astigarraga (G) en lo más alto del mismo, coronando la fachada principal y la trasera, se ven pequeñas cruces de piedra.
En Berastegi (G) y Andraka (B) era costumbre rematar el gailur del tejado sobre la fachada principal con una cruz de hierro forjado que emerge del resto de la cubierta.
En Orozko (B), en el barrio de Ibarra, un par de casas siguen manteniendo en la cumbre del tejado, en el extremo del gailurre que da sobre la fachada, una cruz de hierro con dos llaves entrelazadas, mientras que en la otra son tres las cruces. Parece que son la representación del símbolo papal de las llaves de San Pedro y de las Cruces del Calvario. No se recuerda la función de este adorno pero podría tratarse de una medida de protección de la casa.
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En Abadiño (B) un caserío de Gaztelua tiene en el tejado una hermosa cruz de piedra y otro una cruz metálica con una veleta. En Ataun (G) los caseríos Ermentari aundi y Zapaterizar las tenían de hierro sobre el tejado.
En Goizueta (N) en la cima de Bikariorena hay una cruz de bella factura decorada, con uno de los brazos con forma de lanza y los otros dos con forma de flor de lis. Es de hierro y seguramente fue forjada por uno de los muchos herreros que había en el pueblo.
En Kortezubi (B) sobre la fachada, en el caballete, se veía con frecuencia una cruz o una plancha de hierro con figura de gallo.
En Bedarona (B) en el gailur de algunas casas hay una cruz, pero en esta ocasión es de madera.
En Ataun (G) en los tejados antaño también se trazaba con tejas de color o tono más claro que las demás alguna figura de cruz.
Igualmente hay constancia en Zeanuri (B) de que cuando se retejaba se aprovechaba el diferente color entre las tejas antiguas y las nuevas, más claras, para dibujar una cruz.
Hubo un tiempo en que se puso de moda la colocación de veletas, a menudo con la figura de un gallo, sobre todo en las casas de nueva construcción en áreas rurales. Algunas de ellas se fabricaban artesanalmente por un herrero.
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En Lesaka (N) en el eje del tejado y sobre la fachada ponían en muchas casas la veleta, galurrua, representando figuras de animales, generalmente gallos y otras aves. En el momento de realizar esta encuesta, a finales del segundo decenio del siglo XX, estas veletas todavía se hacían. Otras muchas casas las tenían sin representación alguna[1].
En Allo (N) varias casas nobles rematan en una torre coronada por una cruz o veleta, salvo el Mayorazgo, que cuenta con dos torres.
- ↑ Julio CARO BAROJA, “Algunas notas sobre la casa en la villa de Lesaka…”. Etnografía histórica de Navarra. Tomo II. Pamplona: 1972, p. 85.
