2 de noviembre. Conmemoración de los Fieles Difuntos o Día de las Animas. Arimen eguna

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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Esta conmemoración es conocida en castellano como día de Animas, de Almas o de Difuntos y en euskera como Arimen egune (Amorebieta-Etxano, Bermeo, Murelaga, Zeanuri-B), Animan eguna (Urkizu-Tolosa-G)[1], Hileguna (Iholdi-BN)[2], Hilen-eguna (Liginaga-Z)[3] o Difuntuegune (Urduliz-B).

Originariamente ésta es la festividad dedicada a los difuntos, pero como se ha comentado en el apartado anterior ha ido perdiendo vigencia progresivamente, trasladándose parte de sus ritos al día anterior. Varios de los actos celebrados esta jornada son además prolongación de los iniciados en la tarde de Todos los Santos, que ya han sido detallados en el apartado preceden te.

En esta fecha, al igual que en la anterior, fue habitual ofrendar pan y luz en la sepultura familiar además de dinero para responsos. Ambos días han constituido una unidad por lo que la evolución experimentada por las ofrendas aportadas el día de Difuntos es similar a la comentada para Todos los Santos. Lo mismo puede decirse de lo relativo a las visitas a los cementerios así como de la costumbre de llevar flores a los mismos. Este día los sacerdotes celebraban tres misas de difuntos.


 
  1. Juan GARMENDIA LARRAÑAGA. “La vida en el medio rural: Urkizu (Tolosa-Gipuzkoa)” in AEF, XXXVIII (1992-1993) p. 156.
  2. José Miguel de BARANDIARAN. “Para un estudio de Iholdy. Notas preliminares” in Cuadernos de Sección. Antropología-Etnografía, V [1987] p. 105.
  3. José Miguel de BARANDIARAN. “Materiales para un estudio del pueblo vasco: en Liginaga (Laguinge)” in Ikuska, III (1949) p. 44.