Denominaciones

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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La muerte recibe en euskera comúnmente la denominación de heriotzea / heriotza (Bedia, Berriz, Meñaka, Orozko, Zeanuri, Ziortza-B, Aduna, Altza, Ataun, Bidania, Deba, Elgoibar, Elosua, Ezkio, Hondarribia, Oiartzun, Zegama, Zerain-G, Arano, Ziga-Baztan-N, Lekunberri-BN, Sara-L), herioa (Lekunberri-BN), azkena (Bidania-G). El verbo común para indicar la acción de morir es hil. En Ataun (G) utilizan además kastau.

En euskera se recurre a diferentes voces para expresar el término morir dependiendo de si se aplica a personas o a animales, y entre éstos también se notan diferencias en función de su categoría.

En Ataun (G), si se trataba de culebras, sapos y otros animales que se conceptuaban dañinos, se usaba la palabra akaatu para expresar la muerte; de las abejas y asnos, que eran considerados como animales benditos, no se debía decir akaatu, sino ill, como de las personas; de las vacas, ovejas y otros animales útiles se decía galdu, literalmente perderse, sobre todo si se trataba de muerte causada por algún accidente. En Oiartzun (G) para ciertas alimañas como las culebras se empleaba akabatu[1].

En Zeanuri (B) para las personas y las abejas se emplea la voz il; para los animales tragau y para las culebras akabau.

En Bermeo (B), al referirse a la muerte violenta dada a una culebra, no se decía que se la había matado sino que se la había perdido o acabado, galdu.

En Iholdi (BN) se usa la voz hil para expresar la muerte de personas, abejas y otros animales, salvo la serpiente y el sapo, para los que se emplea kalitu[2].

Según Azkue, se dice hil tratando de personas e insectos. Hablando de reptiles se usa amaitu en dialecto vizcaino y kalitu en bajo navarro y la bortano[3].

En algunos lugares, en vez de estos dos vocablos se usaban estos otros: eho (Barkoxe-Z), kalitu (Baztan-N), akabatu (Ursuaran-G)[4].

Ritual de Viático.

En Bizkaia es común la voz traga(t)u para expresar la muerte en el caso de animales silvestres, y en las personas cuando pierden la vida de forma violenta.

En Barkoxe (Z), para una persona cercana se emplea galdu, perder, cita galdu diagu (hemos perdido al padre); para una persona alejada zenthü o heriotü, morir, y para un animal lehertü, literalmente reventar, destrozar.

También son conocidas numerosas designaciones jocosas para referirse a la muerte, la mayoría de ellas de amplia extensión: estirar la pata, hankea luzatu dau; en Martxuta (BN) azken ostikoa, la última patada; quedarse tieso; quedarse duro, gogortu da; quedarse seco, siketu da, igertu da; palmarla, cascarla, diñarla o guiñarla en Viana y Sangüesa (N), hincarla (Sangüesa-N); ir a criar malvas; pasar a mejor vida, ir al otro barrio o al barrio de Josafat; ir o salir con los pies p'alante, hankaz aurrera; barren janari izan; dejar de fumar, estar en el ciprés (Viana-N); ir a plantar cebollinos con el cogote (Amézaga de Zuya-A), ir a plantar ajos a dedo (Sangüesa-N); ir al archivo o al abejar (por los nichos) (Sangüesa-N).

Manual de Últimos Sacramentos.

Según la mentalidad popular, la enfermedad y la muerte pueden deberse no sólo a causas orgánicas sino también a causas de carácter prodigioso. En este apartado trataremos ambas, haciendo hincapié en las segundas por su mayor interés etnográfico.


 
  1. AEF, III (1923) pp. 115 y 77.
  2. José Miguel de BARANDIARAN. "Para un estudio de Iholdy" in Cuadernos de Sección de Antropología Etnografía, V (1987) p. 108.
  3. Resurrección M.ª de AZKUE. Voz: Il in Diccionario Vasco-Español-Francés. Tomo I. Bilbao, 1905.
  4. Resurrección M.ª de AZKUE. Euskalerriaren Yakintza. Tomo I. Madrid, 1935, p. 221.