Lutos menos rigurosos
Una vez transcurrido el tiempo correspondiente al luto riguroso se pasa al del «medio luto» que puede considerarse como un estado intermedio entre el luto y la vida normal. La duración de este periodo ya se ha detallado en un apartado anterior.
La manifestación del medio luto es, al igual que en el luto riguroso, más evidente en las mujeres que en los hombres. En éstos se evidencia solamente en aquellos casos en los que previamente han vestido de negro, que, como hemos podido ver, son los menos.
Lo que caracteriza este tiempo en lo que respecta a la indumentaria es la incorporación de los colores blanco, gris, lila o morado combinados entre sí, acompañando al negro o solos. Esto es común prácticamente en todas las localidades. En Ezpeize-Undüreiñe (Z) se dice que no se adquiría ropa especial, simplemente se incorporaba a las prendas negras del luto alguna otra gris o blanca, apuntando que la situación económica de las familias no era lo suficientemente holgada como para comprar ropa para ese periodo.
En Urnieta (G) definen el medio luto, luto erdia, como la obligación de llevar la mitad de la indumentaria de color negro.
El medio luto también era la forma en que manifestaban el duelo los familiares menos cercanos desde un primer momento. Así se ha constatado en Plentzia y Zeanuri (B); en esta última población se llevaba por los tíos y abuelos que no vivían en casa. Por el contrario, en Eugi (N) se dice que los signos de luto eran iguales para todos los parientes; lo que cambiaba era su duración.
Durante este periodo la mantilla de las mujeres pasaba de ser tupida a ser de tul (Aramaio-A). En Artajona (N) dejaban de usarla y en Sangüesa (N) se acortaba, «medio manto». En Arberatze-Zilhekoa (BN) sustituían la kaputxina por la mantalina. Se abandonaban las medias negras y se utilizaban grises (Zerain-G, Arberatze-Zilhekoa-BN). La corbata en los hombres pasaba de negra a gris (Artziniega-A).