El cura a falta de una misa. Gauerdiko meza
En esta narración el testigo, generalmente el sacristán, se queda a dormir de noche en la iglesia. A medianoche se aparece un cura que va a la sacristía y se reviste para celebrar. Sale al altar y mira hacia atrás. Al ver que no está el sacristán para ayudarle se desprende de las vestiduras y desaparece. El sacristán comenta el hecho con algún cura y éste le propone volver de noche a la iglesia. De nuevo, a medianoche, se aparece el sacerdote y repite los mismos actos. En esta ocasión cura y sacristán le ayudan. El aparecido les cuenta que la que están diciendo es una misa de encargo, y que llevaba doscientos anos sin haber podido celebrarla. Esta es la causa de que estuviera en el Purgatorio, pero al fin, tras haberla celebrado, podía ir al Cielo.