Bendición de semillas

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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Hasta los años 1960 se bendecían comúnmente las semillas destinadas a las nuevas siembras. Esta bendición en muchas localidades se hacía durante las rogativas de san Marcos (25 de abril) que tenían lugar en la época de la sementera.

En los años 1920 en Amorebieta (B) era el día de Difuntos, 2 de noviembre, cuando en la iglesia parroquial se procedía a la bendición de una pequeña cantidad de trigo cuyos granos eran agregados al resto de semilla de trigo para la siembra inmediata[1]. En Moreda (A) dicen los informantes que este día de Difuntos era una fecha privilegiada para sembrar la cebada. Se le conoce como el día de la sementera.

En Apodaka (A) recuerdan los mayores que se bendecía un poco de grano en la misa que se celebraba en Nuestra Señora de Ascoa con motivo de la fiesta de acción de gracias, el 24 de septiembre.

En la ermita de Santa Engracia de Segura (G) se bendecían las semillas de maíz y alubia el día de la santa, 16 de abril.

También se llevaban semillas a las bendiciones efectuadas en determinadas festividades invernales. El Moreda (A) el 17 de enero, festividad de san Antón, además de la bendición de los animales, se solían llevar sacos o capacillas con trigo y cebada para su bendición. Una vez bendecido, este grano se mezclaba con el resto del granero para que hubiera trigo o cebada bendecidos para todo el año.

En Valderejo (A) también se bendecían ese día parte de las semillas que después se mezclaban con el resto que se guardaban en casa.

El día de san Blas, 3 de febrero, en muchas parroquias durante la misa se bendecían semillas de alubias y maíz que serían empleadas en las siembras de primavera. (Abadiño-B, Beasain, Hondarribia-G). Esta costumbre se ha vuelto a actualizar en algunos pueblos pequeños.


 
  1. Félix de ZAMALLOA. “Fiestas populares. Amorebieta” in AEF, II (1922) p. 94.