Pala para aventar
En Valderejo (A) antes de introducirse el aventado mecánico este se realizaba valiéndose de una pala de madera con la que se recogía de la era el producto de la trilla. La pala estaba compuesta de un mango en cuyo extremo tenía una pieza rectangular, ligeramente curvada hacia arriba. Al aventar se empleaba para echar los restos de la trilla a la tolva de la máquina y para retirar los excrementos que caían sobre la parva de las caballerías que participaban en ella. Esta forma de aventar desapareció a principios de los años 40 del siglo XX.
En Bernedo (A) esta pala de madera se empleaba para dar vuelta a la parva ya triturada y evitar que quedara ganchugo o ganchigo (trozos de espiga no triturados). Se empleaba también para recoger el grano limpio.
En Berganzo (A) traspalear consistía en derramplar la cebada (quitar las ramplas o aristas del cereal) y dar la vuelta a la parva con el fin de hacer subir a la superficie el grano que quedaba sin soltar la cáscara que lo envolvía.
En Abezia (A) esta pala de madera servía para aventar el grano cuando estaba prácticamente limpio. En esta localidad alavesa llaman belaukia o belaikia a una pala triangular de madera que remata el mango a modo de una azada y sirve para recoger el grano del suelo o la parva que se amontona en la trilla para luego aventar.
También en Moreda (A) la pala de aventar era de madera y de una sola pieza Se empleaba para echar al aire el grano revuelto con la paja para que la paja volara y el grano cayera limpio.
En Viana (N) anotan que esta pala era de forma rectangular, con el borde ligeramente curvado y largo mango, todo en una pieza de madera; era utilizada para aventar el grano, para cargar los sacos con cereales, etc. A veces estaba formada por dos piezas sujetas por un clavo.
Se utilizaba también el ablentón, horquillo grande de madera con mango largo y travesaño con seis o siete púas cilíndricas con las puntas afiladas. Se usaba para mover la mies y cargar la paja desde el suelo hasta el carro. En otras partes le llaman bieldo.
En Muez (Valle de Guesálaz) y Ugar (Valle de Yerri) (N) con el ablento u horca de madera era ablentado al aire la parva y con la criba del guerbillo se acababa de separar la paja.
En Cárcar (N) llaman bieldo a la horca para aventar el grano y separarlo de la paja. Está formado por un largo mango, astil, en uno de cuyos extremos se inserta transversalmente otra tabla con dientes o púas.