Modo de uncir los bueyes

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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Aportamos algunos ejemplos del modo de uncir los bueyes:

En Zeanuri (B) la pareja de bueyes o vacas se uncía de la siguiente manera: primero se colocaba el yugo sobre la cabeza de uno de los animales mientras otra persona lo sostenía por el otro extremo. Al tiempo se le ponía en la frente una pieza de cuero y tela, con borlas, denominada zapea o frontadea y se ataba el yugo a los cuernos con unas correas de cuero llamadas hedeak. Esta operación se repetía con el otro buey o vaca. Seguidamente sobre las cabezas de los animales y el yugo se colocaba una especie de almohadilla y sobre esta una piel de oveja o de carnero denominada narrue. La función de esta piel era evitar que las correas y el yugo se mojaran o que el sol les perjudicara.

En Elosua (G) se ha recogido la siguiente descripción de cómo se unce el yugo: “Uztarrixa lo tzeko hede-zulotik heria pasa zamarra zapalduz, belarri atzetik sartu, bueltia emon ta zamarra gañetik beste aldera, azpitik sartu, atzeko pestañian bi buelta emon. Gero belarri azpitik adar-zulo ta hede-koska hartuta hiru bat buelta emon ta aurretik pasa beste adarrera ta berriz adar-zulo ta hede-koskan beste hiru buelta emon. Azkenik heri-puntia buelta hoixetan gogortu ta bi aldiz toki berdiñian pasau.

(La larga correa de cuero, heria, se pasa por el orificio existente a tal fin, hede-zuloa, de forma que pise el frontal, zamarra. Se introduce por detrás de la oreja, se le da una vuelta y se pasa al otro lado por encima del frontal. Se mete por debajo y en la pestaña de detrás se dan dos o tres vueltas, se saca por debajo de la oreja y se dan tres vueltas pasando por el cornil, adarzuloa. La correa se pasa por encima del frontal y se ata de la misma forma al otro cuerno. La punta de las correas se enlaza entre las vueltas y se introduce dos veces en el mismo sitio para asegurarlo).

Unciendo la pareja. Apellániz (A). Fuente: Isidro Sáenz de Urturi, Grupos Etniker Euskalerria.

En Gautegiz Arteaga (B) se ha recogido la siguiente descripción: Se sacan de la cuadra los bueyes –las vacas en su caso– primero uno y luego el otro (“banan-banan idijek kortatik atara behar dire”). Era común que si no había dos personas diestras en la operación, el experto le encajara primero el yugo a un animal y otra persona, en ocasiones un niño, aguantara el otro arco del yugo, ganbelie. Se le coloca el frontal, zapie, al que previamente se le ha introducido por la abertura que posee, la coyunda, hedie. Con esta se dan tres vueltas por detrás y por delante del cuerno del animal (adarpetik hiru buelta, kanpotik). Por un saliente del que dispone el yugo se dan otras tres vueltas (“koxko bat deko buzterrijek eta handik beste hiru buelta emon behar jakoz”). Además hay que darle a la coyunda otras tres vueltas por delante y por detrás (“beste hiru buelta eurretik eta atzetik”). Es importante apretar lo más fuerte que se pueda haciendo incluso fuerza con la rodilla. Luego se opera de igual modo con el segundo animal. Si hay dos personas diestras se pueden uncir los dos animales a la vez. A cada buey se le sujeta el yugo y el frontal con su coyunda respectiva.

Sobre el yugo se coloca una piel, narrue, sobre todo con la finalidad de que las coyundas no se sequen (“hediek ez deidzen laztu”). La piel de la coyunda no está tratada, se dejaba a reblandecer en leche cruda (“esne gordiñetan beratu”) y luego se le frotaba con la grasa almacenada donde tiene la verga el cerdo capado (“gero emoten jakon txarrijen zilbegije”).

El yuguero, buztergiñe, al encargarle la fabricación del yugo tenía cuidado en cargar menos el yugo sobre la vaca menos fuerte. El hueco, burteda-zuloa, donde se introducía el varal del carro, partikie, se ladeaba algo.

Telesforo Aranzadi en 1931 ofrecía una descripción de la forma de uncir los bueyes. Los frontiles, que se conocen con los nombres de kopetekuak, ipurukoak, zamarrak, bildak, biltak, son de cuero claveteado, con dos orejuelas que van por debajo de los pomos y en su borde inferior el fleco de madroños para espantar las moscas. La correa de sujeción pasa desde el agujero, ganbela-zuloa, bajo el pomo interno, ugatza, adaganekoa, y sujetando el frontil debajo del pomo externo encima del cabo del yugo. Segunda vez al frontil, a la oreja interna del yugo, belarria, o sea extremo interno del canal, por este a su oreja externa. Al frontil tercera vez y vuelta por el canal al pomo y pegollo externos, koska, oreja externa. Segunda vuelta por estos tres salientes, frontil cuarta vez, oreja interna, por debajo detrás al pegollo, pomo y oreja internos, segunda vuelta por estos tres salientes, por debajo detrás del pegollo interno, un lazo sencillo en la inmediación del pomo externo y otro doble en la del interno, para todo lo cual necesitan una correa de seis metros. Encima de todo se tiende una piel de oveja, uztalarrua, uztarrestalkia. La piel de oveja y las numerosas vueltas de la coyunda ocultan la talla ornamental del yugo[1].


 
  1. Telesforo de ARANZADI. "Aperos de labranza" in Folklore y costumbres de España. Tomo I. Barcelona: 1946, pp. 342-344.