Abatza
Se ha denominado con el nombre de abatza o apatza la vasija de grandes dimensiones a la que se vertía la leche filtrada; en ella se cuajaba ésta para proceder a la elaboración de los quesos.
Este gran cuenco, tal como se ha recogido en las majadas encuestadas, a principios del siglo XX era de madera; de ahí que en algunas localidades como Urepele (BN) se le denomine con el término zura[1] que en euskera significaba precisamente ‘madera’. También en la región de Zuberoa recibe este mismo nombre.
El recipiente era de una sola pieza y mantenía el tamaño y la forma del tronco con el que se había fabricado siendo su diámetro algo mayor en la boca que en la base. En lados contrapuestos tenía dos salientes o agarraderos. Su capacidad era mayor que la del kaiku; podía ser de 12 a 20 litros, si bien se encuentran ejemplares que contienen hasta 35 litros.
Para su fabricación se ha empleado generalmente el tronco del abedul, urkia, cuya madera es fácil de tallar (Sara-L; Urbia-Oltza-G; Aramaio-A; Eugi-N); también se ha utilizado madera de aliso, altza (Oiartzun-G) e incluso de tilo, ezkia (Oñati-G).
El uso de este gran cuezo de madera donde se cuajaba la leche ha sido registrado en toda la zona pastoril de la Vasconia húmeda. Ya se han mencionado las regiones más orientales de Baja Navarra y Zuberoa donde se le designa con el nombre de zura; más hacia el centro (Ainhoa-L, Oiartzun-G, Ezkurra, Valle de Larraun-N) se le denomina abatza y en el tramo más occidental (Ernio, Ataun, Urbia, Oñati-G, Aramaio-A, Gorbea[2]-B) apatza. Este mismo nombre se emplea también en aquellas áreas pastoriles que perdieron el uso del euskera; los pastores de Ayala (A) llamaban paz al recipiente de madera de gran cabida y en Agurain (A) se le denomina apax[3].
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En el Valle del Roncal el recipiente de madera de haya donde se cuajaba la leche antes de moldear los quesos era la herrada.
Aparte de estas herradas de madera se han empleado también calderas de cobre para cuajar la leche. Así en Aria (N) del kaiku se pasa la leche por un colador, pasadorea, a una caldera de cobre bezkoa o berza. También en Donaixti-Ibarre (BN) y en Liginaga (Z) le denominan bertza o bertz handia. El caldero de cobre utilizado para este menester recibe el nombre de pandelu en Ezpeleta (L) y en Souraide (BN); en Donoztiri (BN), garlanda.
En los montes de Triano y Ganekogorta (B) se utilizaron antaño herradas o calderos de latón para cuajar la leche, la masa del cuajo se cubría con un lienzo blanco.
Este recipiente pasó luego de ser un balde de metal galvanizado, esne-ontzia, a ser una artesa o cuba de aluminio o de acero inoxidable. Durante este proceso se usaron otras vasijas. Barandiaran señala que en Sara por los años cuarenta una vasija de barro de forma troncocónica sustituyó al antiguo abatza de madera. Se le denominó terrina y tenía una capacidad de 15 a 20 litros[4]. Con un término similar, terreina, se designa en Ezkio (G) al recipiente que recoge la leche filtrada.
- ↑ José Miguel de BARANDIARAN. «Materiales para un estudio etnográfico del pueblo vasco en Urepel» in AEF, XXXI (1982-1983) p. 15.
- ↑ En Zeanuri-Gorbea llamaban los pastores apazkoa al cuezo de madera de pequeñas dimensiones.
- ↑ LÓPEZ DE GUEREÑU registró la voz «paz» con este mismo significado en la Sierra de Entzia. Vide Voces alavesas. Bilbao, 1958, p. 127.
- ↑ José Miguel de BARANDIARAN. «Bosquejo etnográfico de Sara (V)» in AEF, XXI (1965-1966) p. 105.
