Producción y precios de la lana
En el Valle de Carranza (B) en los años veinte, por una arroba de lana se pagaba entre cinco y seis pesetas. En 1943 una disposición gubernamental prohibió que los ganaderos se reservasen para sí ninguna cantidad. Ese mismo año los pastores carranzanos declararon una producción de 8.163 kg que se les pagó al precio de tasa oficial de 4,80 pesetas/kg, estipulándose la cantidad productiva de 1,5 kg de lana por oveja. Cinco años más tarde, en 1948, los ganaderos entregaron 1.479 kg, siendo el precio de tasa oficial de 11,10 pesetas/kg. En 1997 el precio osciló entre las 75 pesetas/kg que se pagó a los ganaderos del sur del Valle y las 100 de los del norte.
Según datos recogidos por Vicario de la Peña en este mismo municipio de Carranza en los años treinta, los pastores obtenían importantes ganancias con la venta de la lana. Así en la primera mitad de ese decenio hubo un año en que se la vendieron a unos comerciantes por valor de 120.000 pesetas, sin contar la que fue vendida por otros en los barrios de Ambasaguas o Molinar. Por tener las ovejas carranzanas buen tamaño y buena lana, eran bastantes los carneros que en esa época se vendían a las provincias de Santander y Burgos, para mejorar allí la raza, del mismo modo que era también frecuente vender rebaños para Castilla y Gipuzkoa[1].
En Lanestosa (B), la lana fue antaño muy cotizada, llegándose a pagar en los decenios treinta y cuarenta, a 70 pesetas el kilo.
En Gerena (Mallabia-B), en tiempos pasados, antes de la guerra civil de 1936, se pagaba a 25 pesetas la arroba y para hacer un colchón se necesitaban dos. En Zenarruza (Markina-B) en los años cincuenta por una arroba de lana (equivalente a 12,5 kg) se pagaba alrededor de 1.000 pesetas.
En Nabarniz (B), poco después de la misma contienda, en el decenio de los cuarenta, según una pastora, subió algo el precio y se pagaba a unas 8 pesetas la arroba. Después hubo años en que gozó de gran estima llegando a alcanzarse la cifra de 500 pesetas la arroba y hasta 1.000.
En Bernagoitia (B), recuerda un informante que en el año 1948 su padre vendió la lana a 600 pesetas la arroba (12,5 kg) y para hacer un colchón se necesitaba arroba y media aproximadamente y en Berriz (B) hacia 1950 la arroba de lana se cotizaba a 1.000 pesetas.
En Zuya (A), en el decenio de los cincuenta, se registró el dato de que el promedio de lana que se obtenía por cabeza era de dos kilos y la venta se realizaba en sucio.
En las Améscoas (N) señalan los informantes que la lana de las ovejas lachas nunca ha sido muy cotizada en los mercados y ha habido épocas en que los pastores se han visto en dificultades para venderla.
En las Bardenas (N) anotan que el precio siempre se ha cotizado bajo. Un informante recuerda que en 1949 le cobraron una peseta por esquilar cada oveja y la vendieron a 65 pesetas el kilo. En los años noventa les cobraban 150 pesetas por cada una más la peonía y la vendían a 40 pesetas/kg.
En los montes de Triano (B), en los sesenta, la lana se vendía a buen precio, a 125 pesetas/kg. Luego se registraron importantes descensos pagándose en 1984 a 90 peset as/kg y, como al año siguiente se cotizó entre 110 y 125 pesetas el kilo, hubo pastores que se negaron a venderla y la almacenaron. En Mendata (B), en 1960, se vendía a 100 pesetas el kilo.
En Ernio (G) en la década de los sesenta la lana se vendía a 70 pesetas/kilo; en los noventa, también a 70 pesetas y en 1998, dependiendo de su calidad osciló entre 70 y 100 pesetas.
En Moreda (A) señalan los informantes que un rebaño de cuatrocientas ovejas suele dar al año unos novecientos kilos de lana, pagándose entre 40 y 80 pesetas el kilo.
En el Valle de Orozko (B) se ha recogido recientemente el dato (1997) de que por una capa de lana de oveja se paga alrededor de 100-115 pesetas el kilo. Suelen pesar entre 2 y 4 kg.
En Izarraitz (G) hubo muchos años en que su precio estuvo cayendo sin que apenas tuviera salida aunque últimamente se ha recuperado de nuevo algo. También en Arrieta (Sollube-B) el precio actual es muy bajo y así un informante tuvo que venderla recientemente a cinco pesetas el kilo.
En Uharte-Garazi, Ezterentzubi (BN); Pagola y Zunharreta (Z) durante los últimos años se ha llegado a quemar puesto que no tenía salida. Ahora vuelve a gozar de cierta estima y alcanza en el mercado el precio de alrededor de 1 ó 1,5 FF el kilo.
- ↑ Nicolás VICARIO DE LA PEÑA. El noble y leal Valle de Carranza. Bilbao, 1975, p. 143.
