Caballos
Por regla general cuando se compraba ganado equino de labor era adulto y ya tenía nombre. Al estar criado y habituado a su apodo, el comprador solía respetar el que tuviera. A los potros o a los muletos sí se les ponía nombre (Moreda-A).
Por el color de la capa
Mohino, Tordo, Moreno, Rubio, Canela, Bragado (Moreda-A); Platero (en esta última localidad y en San Martín de Unx-N); Pinta (Treviño-A); Rubia (Valderejo-A).
Alazán/a, Moro, Pinto, Morico/a, Roja, Blanca, Bayo (blanco amarillento), Pelicana (Amézaga de Zuya-A); Canela (Berganzo-A); Muino/a, Castaño/a, Bayo/a, a los machos y mulas (San Martín de Unx-N).
Txuri (blanco), Beltza (negro) (Hondarribia-G).
Estrella, Lucero/a (Berganzo, Treviño, Valdegovía, Valderejo, Zuya-A; Izal, Sangüesa, San Martín de Unx-N).
Por el aspecto y carácter
Chata (Valderejo-A); Perla, Caballa, Potra (Amézaga de Zuya-A); Zabala (ancha) (Hondarribia-G).
Noble (Amézaga de Zuya-A); Arrogante (Moreda-A); Revoltosa (Treviño-A); Nerviosa (Hondarribia-G).
Nuestras encuestas han aportado otros muchos nombres de yeguas y caballos de difícil clasificación. He aquí una muestra de ellos:
Pasiega, Pedresa, Zurronera (Valderejo-A); Po ttolo, Pottiko (Astigarraga-G); Carolina, Huesitos, Duranca, Noble, Cordero (Berganzo-A); Coronela (en esta última localidad y en Treviño-A).
Peregrino, Jardinera (Moreda-A); Romero, Galán, y a los machos y mulas, Navarro/a, Catalán/a (San Martín de Unx-N); Carbonero/a, Tordillo/a (en esta última localidad y en Sangüesa-N); Cardelina, Carioca, Brillante, Lechero, Romero (Sangüesa).
Como ocurre con otros animales también se recurre a ponerles el nombre del lugar de procedencia, así Odoizkoa (la de Oderitz), Astizkoa (la de Astitz), creando nombres concatenados a partir del inicial, Astizkoan ume (la cría de la de Astitz) y sucesivamente (Larraun-N).
En algunos lugares ha sido frecuente llamar Luchi a las yeguas porque muchas de ellas se adquirían en la feria de Santa Lucía que se celebraba en la localidad guipuzcoana de Zumarraga-Urretxu (Lezaun-N). En Lezaun las «yeguas de baste», o de carga, recibían a menudo el nombre de Bastera.