V. ESTABLOS Y RECINTOS PARA LA CRÍA DE ANIMALES
Entre los animales que se han criado en los establos ha sido usual tener vacas para la producción de leche y terneros para engorde. El cerdo ha resultado imprescindible en todas las casas y las aves, tales como gallinas y pollos, además de los conejos, han estado presentes en la mayoría de las cuadras para aprovechar su carne y huevos. Aparte del ganado mencionado también se han solido criar animales de carga como bueyes, burros, mulos y caballos, que han ayudado en las labores de la labranza y en el transporte de aperos, forrajes y cosechas. Asimismo, perros y gatos han compartido establo y casa.
Todos los animales descritos se han criado y alimentado en los establos domésticos, sin perjuicio de que algunas especies pudiesen reunirse en otro tipo de recintos anejos o alejados de la casa o en corrales municipales desde donde salían a pastar al campo bajo la custodia de un pastor, tal y como ha ocurrido en algunas poblaciones de Álava y Navarra.
En Moreda (A) en la cuadra han vivido los animales de trabajo tales como el macho, la mula, el caballo y los bueyes, además de conejos, cerdos, cabras y aves de corral como gallinas y pollos. Asimismo los animales de compañía como el perro. En los corrales, sitos a las afueras del pueblo, los animales de rebaño como ovejas y cabras.
Además del ganado estabulado permanentemente en la cuadra, el de monte se mantenía en los establos durante los meses fríos del invierno.
En Abadiano (B) las cabras y las yeguas habitualmente estaban en él pero cuando empeoraban las condiciones climáticas había que bajarlas a la casa e instalarlas donde se pudiese, tanto en la cuadra como en la tejavana.
En Arraioz (N) se estabulan durante el periodo invernal las vacas y cerdas recién paridas. Testimonios del año 1997 señalan que debido a la parcelación del monte y a la escasez de pasto se ha comenzado a recoger en los establos a las yeguas de mediados de diciembre a mediados de marzo.