Vasconia continental

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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En Lapurdi se criaban en el monte ovejas, pottokas y betizus. Estas últimas se tenían sobre todo en Olhette (Urruña). También se subían cerdos y se dejaban en el bosque para que comiesen bellotas. Había además cabras de las que se obtenía sólo carne y no leche, pero estaban mal vistas por los destrozos que causaban.

Pottokas en Urtsuia (L). Fuente: Michel Duvert, Grupos Etniker Euskalerria.

En Urepele (BN) cada familia cría su ganado en el establo de la casa durante gran parte del año si bien en verano y otoño sacan algunas reses al monte comunal. Uno de estos lugares adonde llevan vacas, yeguas y ovejas es Sorain en Val de Erro. Un día de mayo, el quince generalmente, los vecinos del Valle de Baigorri, que comprende los pueblos de Banca, Aldudes y Urepele, reúnen en esta última localidad muchas vacas y yeguas. El guarda de Sorain las marca con las letras VE (Val de Erro) y seguidamente las llevan a dicho monte. Las personas que intervienen en esta tarea vuelven a Urepele donde se quedan a comer. El notario de Baigorri cobra por cada cabeza de ganado la cantidad estipulada con Val de Erro. Con este motivo se hallan presentes el subprefecto, el jefe de los guardas forestales, el capitán de los gendarmes, el alcalde de Val de Erro y otras autoridades del Valle. Todos comen en un restaurante. Por San Miguel (29 de septiembre) se retira de Sorain el ganado que subió en mayo y se llevan allí las ovejas, que permanecerán en el pastizal durante dos o más meses, según lo permitan las condiciones meteorológicas[1].

En Zuberoa subían al monte con las ovejas y con los cerdos que cebaban con el suero. También podían tener en los olha dos o tres cabras como máximo. Los había que subían becerras, pero más tarde, a partir del 15 de junio e incluso del 1 de julio, dependiendo de las condiciones climáticas. Los caballos se llevaban entre junio y septiembre porque estos animales devoraban los pastos y no dejaban nada para las ovejas. El sindicato de Zuberoa se aseguraba de que no ascendiesen a los pastos elevados fuera de estos periodos ya que la hierba tenía que regenerarse.

En Zunharreta (Z) llevaban las vacas a primeros de julio. Subían a los mismos pastos que las ovejas pero descendían antes, normalmente al llegar octubre y a veces también a principios de septiembre. Los del valle de Cize subían además sus caballos en las mismas fechas que las ovejas ya que de este modo comían gratis. Todos los animales pastaban libres en los pasturajes elevados.

En Liginaga (Z) los rebaños de ovejas se llevaban a los pastos pirenaicos el 1 de mayo, así como los cerdos. Las vacas y caballos se subían en junio y los corderos, el día 15 del mismo mes. Por Madaleina, 22 de julio, se volvían a bajar para esquilarlas y de nuevo se retornaban al monte. En los pastos altos se apacentaban además de ovejas, cabras, vacas, caballos y cerdos. Había algunos pueblos como Barkoxe que en las zonas elevadas tenían un área destinada al pasto de las ovejas y otra para las vacas. Determinados sitios en los seles o pasturajes elevados se reservaban para los corderos. Su nombre era axurteli. Cada pueblo tenía señalada su parte, olhaparte, en el monte para que se apacentase en ella su ganado. Liginaga tenía su olhaparte en el paraje denominado Burusieta. Además sus rebaños se llevaban también a Astojangia y Ardakotxia, pasturajes correspondientes a la comunidad de Soule. Liginaga pagaba a esta comunidad por tales pastos una contribución anual que cobraba a los vecinos que llevaban allí sus rebaños en proporción a los quesos que fabricaban[2].


 
  1. José Miguel de BARANDIARAN. «Materiales para un estudio etnográfico del pueblo vasco en Urepel» in AEF, XXXI (1982-1983) pp. 15-16.
  2. Idem, «Materiales para un estudio del pueblo vasco: En Liginaga (Laguinge)» in Ikuska. Nº 8-9 (1948) pp. 21-22.