Sierra de Entzia

De Atlas Etnográfico de Vasconia
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La Sierra de Entzia constituye la parte occidental de Urbasa en el límite del territorio de Álava con Navarra. Al norte de ella se encuentra el valle navarro de la Burunda y al sur los altos de Opakua (A) que enlazan con la Sierra de Lóquiz (N). La carretera que asciende por el puerto de Opakua atraviesa Entzia y entra en Navarra por las Améscoas.

La Parzonería General de Entzia comprende 2.880 ha de monte (pastos y arbolado). De ella son congozantes nueve municipios alaveses: Asparrena, San Millán, San Vicente de Arana, Alda, Contrasta, Ullibarri-Arana, Roitegui, Onraita; presididos por Agurain.

Araia, cabeza del municipio de Asparrena (A), pertenece a la Parzonería General de Gipuzkoa y Álava y por ello los pastores de esta localidad subían a las majadas de Aizkorri en Urbia, en Aratz, en Apota y en Umandia. Pero el municipio es también congozante de la Parzonería de Entzia y los pastores acudían a ella con sus rebaños; es en esta última sierra don de hay una mayor concentración de chabolas.

Txabola con redil. Opacua, Entzia (A). Fuente: Archivo Fotográfico Labayru Fundazioa: José Ignacio García Muñoz.

En los años veinte la majada de Araia ocupaba un rincón del prado de Legaire a 900 m de altitud. La componían seis chozas poco distantes entre sí y ocupadas por nueve pastores.

Estas chozas tenían las mismas características que las de Urbia. Desde principios de los años veinte estaba permitido cubrirlas con teja. Pero esto no ocurría antes, por lo que los techos se tapaban con tepes y brezo o con losas de piedra. Según el testimonio de un anciano pastor recogido por Barandiaran esto era «para que nadie se hiciera propietario», pues la teja significaba posesión. Estaba también prohibido cerrar con llave la puerta de la choza[1].

Actualmente, tal como se constata en nuestra encuesta del año 1998, las chabolas son utilizadas únicamente en el periodo estival y la estancia en éstas es cada vez más corta. También son menos los pastores que recurren a ellas.

De planta rectangular están construidas con piedra y argamasa. La cubierta, a dos aguas, lleva teja y la entrada es perpendicular a la viga del caballete.

Su interior está distribuido en tres estancias: en una se encuentra la cocina, con fogón bajo; aquí prepara el pastor la comida y recibe a sus amistades. Hasta hace unos años también elaboraba en este lugar el queso. Por una puerta pequeña se comunica con una segunda estancia en la que duerme el pastor.

La tercera dependencia, separada por un ligero tabique, es la parte más importante de la chabola, la quesera o gaztategia. En tiempo no muy lejano aquí se guardaba todo el caudal del pastor: los quesos, que se curaban durante tres meses para venderlos posteriormente en el mercado.

Las chabolas tenían varios anexos: el aprisco, eskorta, donde el pastor recogía las ovejas para el ordeño; la gausarea o recinto en el que en determinadas noches el pastor guardaba las ovejas. Tenía también otros espacios como la huerta, baratza, y la leñera, egurtegia.

Actualmente la mayoría de las chabolas dispone de agua corriente y de placas fotovoltaicas que producen energía eléctrica suficiente para iluminar varias lámparas o calentar agua.

También los pastores de Agurain han conducido tradicionalmente sus rebaños a la Sierra de Entzia y a la de Iturrieta situada más al occidente[2]. En los años cincuenta los pastores que disponían de buenos rebaños se dedicaban al pastoreo con exclusividad, prescindiendo casi de la agricultura de la que sacaban lo necesario para el sustento familiar y los forrajes que permanecían ensilados hasta la llegada del invierno, época en la que eran utilizados como alimento del ganado[3].

Sus chozas tienen las características antes descritas. La construcción de chabolas está reglamentada hoy en día. El rebañero que quiera levantar una debe solicitar permiso al ayuntamiento declarando sus dimensiones, que no deben sobrepasar los 25 m2: 8,30 m de largo por 3 m de ancho. El permiso se otorga con la finalidad de pastorear y se ha de pagar un canon anual. El solar sobre el que se edifica sigue siendo propiedad de la Parzonería de Entzia.

En esta sierra pueden encontrarse todavía rediles construidos para retener al ganado. Habitualmente eran descubiertos aunque hubiera alguno con cubierta de tejado.


 
  1. BARANDIARAN, «Contribución al estudio de los establecimientos humanos…», cit., pp. 139-140.
  2. José M.ª AZCARRAGA. «Aspectos de la vida rural en Salvatierra» in AEF, XVI (1956) p. 32.
  3. Idem, «La vida pastoril en la región de Salvatierra (Alava)» in AEF, XV (1955) p. 170.