Valle de Carranza
En el Valle de Carranza aproximadamente el 80% del terreno es comunal. Los rebaños de ovejas han venido aprovechando en las últimas décadas los pastos de la Sierra de Ordunte.
El reglamento para la roturación y legitimación de los terrenos comunales del Valle, aprobado en 1910, hizo que zonas tradicionales de pastos y bosques de aprovechamiento comunal fuesen desapareciendo y que apareciesen los cierres y roturas particulares. Con anterioridad, las ordenanzas municipales habían reglamentado la mejora y aumento de la ganadería y las normas sobre el pasturaje en los terrenos comunales[1].
En los años cuarenta, los pastores pagaban 2 reales por cabeza de ganado lanar; a mediados de los ochenta, 5 pesetas; a finales de los noventa se mantenía la misma cantidad de 5 pesetas por oveja, mientras que la cuota por cabeza de vacuno y caballar ascendía a 25 pesetas.
- ↑ Nicolás VICARIO DE LA PEÑA. El Noble y Leal Valle de Carranza. Bilbao, 1975, p. 56.